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Con la mente puesta en el mundial de rallyes, el hijo del carismático piloto Petter Solberg, ha iniciado ya su temporada 2020. A la vez que lucha por intentar sellar cuanto antes su programa en el WRC2, el talentoso piloto nórdico no pierde el tiempo y ya ha viajado hasta Francia donde ha iniciado sus test previos a Monte Carlo. La cita del Principado es, junto a Suecia, las dos únicas que parecen haberse confirmado para él por el momento.
Sobre asfalto, el pequeño Solberg ha podido ir sumando kilómetros con el VW Polo GTi R5 sobre asfalto, una superficie sobre la que no goza de tanta experiencia como en la tierra. Aún así, y después de unos años en los que ha ido disputando carreras por todo el globo terráqueo, Oliver Solberg ha decidido aceptar el reto de afrontar una de las pruebas más imponentes del mundial: el Rallye de Monte Carlo.
En esta sesión de test ha dejado entrever además un pequeño anticipo de la decoración que empleará en la cita inaugural del mundial, así como también los neumáticos que empleará. Por si todavía quedaban dudas, Solberg ha apostado por la firma italiana Pirelli. Marca que a partir del próximo año calzará a todos los coches de la categoría reina del mundial y que durante estos años ya ha sido referente en otros certámenes de peso.