Los constantes giros de guion de la CERT 2021

Si se tratase de un filme, habría recibido infinidad de premios por la impredictibilidad de los acontecimientos. La primera temporada de la Copa de España de Rallyes de Tierra en la renovada estructura de la modalidad en nuestro país contó con numerosos actores de primer nivel como el catarí Nasser Al-Attiyah, vencedor del Rally Tierras Altas de Lorca a los mandos del Volkswagen Polo GTI R5. El piloto de Toyota en el Dakar confirmó un programa en la CERT a comienzos de año, aprovechando su residencia en Cataluña.

Los galones y su palmarés deportivo le situaban como indiscutible favorito al entorchado, pero en los habituales del Supercampeonato de España, que también puntuaban para la CERT, se topó con unos rivales de envergadura. Los primeros en desafiarle fueron Jan Solans-Rodrigo Sanjuán con el Citroën C3 Rally2 en territorio murciano. La igualdad entre ambos motivó un tramo final trepidante al que partían separados por 0.6" en favor de los españoles, pero el ataque de Al-Attiyah enjugó esa diferencia.

En el Rally da Auga, José Antonio Suárez-Alberto Iglesias le doblgaron a bordo del Škoda Fabia Rally2 Evo, dominando con contundencia de principio a fin. Pero uno de los puntos de inflexión que más alteró la tendencia de la CERT tuvo como escenario de grabación la isla de Lanzarote. La explosividad de Al-Attiyah y las rápidas pistas volcánicas no congeniaron y el líder del certamen abandonó a las primeras de cambio por un doble pinchazo. Gorka Eizmendi-Diego Sanjuán heredaban la primera plaza.

El percance que apeó definitivamente de la CERT a Al-Attiyah ocurriría en Chipre, mientras defendía su corona de Oriente Medio. Una salida de carretera terminaba en un conato de incendio que calcinó por completo su Volkswagen. Adiós a la campaña de rallyes. Por otra parte, en la siguiente ronda del nacional, el Rally Ciudad de Granada, enésimo golpe de efecto con el accidente de Eizmendi-Sanjuán cuando luchaban al segundo por el triunfo frente a Juan Carlos Quintana-Yeray Mujica.

El Škoda Fabia R5 del vasco sufrió severos daños que le obligaron a participar en Madrid con un Hyundai i20 N5. Esta sería su última prueba, ya que decidió abandonar la CERT por disconformidades con los organizadores de varias citas. Así las cosas, Quintana-Mujica se situaban al frente del campeonato con su Škoda Fabia R5 y una renta considerable sobre sus inmediatos perseguidores... hasta que erraban en Pozoblanco y volcaban al aterrizar con el frontal de su coche tras un rasante.

Al mismo tiempo que los favoritos lidiaban con contratiempos, uan dupla gallega evolucionaba paulatinamente sin restar protagonismo a los equipos que les precedían en la tabla. Iván Ares-David Vázquez se enfocaron en desarrollar su conducción sobre un firme al que no estaban acostumbrados con el Hyundai i20 R5, y su esfuerzo les permitió salir al Rally Reino de León con opciones. Aunque no dependían de sí mismos, se entregaron al máximo y se adjudicaron el título al que tantos aspiraron.