Ken Block lo sigue intentando con los rallyes, pero no termina de alcanzar el nivel de los aspirantes al título y lo cierto es que, ni falta que le hace. Porque hay algo en lo que Block no tiene rival, y es en dar espectáculo con sus famosas producciones: las Gymkhanas.
Después de seis ediciones en las que se ha superado una tras otra, conseguirlo una vez más se antojaba complicado, pero sin duda con la Gymkhana 7 lo ha conseguido. Y en buena parte se lo debe a la nueva montura que ha estrenado para la ocasión, un espectacular Mustang de 1965 con 845 CV.
Rebautizado como Hoonicorn RTR, esta bestialidad de Mustang es el fruto de 2 años de trabajo dando forma a los deseos más oscuros de Block. Para muchos será un sacrilegio, pero era imprescindible colocarle un sistema de tracción total, algo que junto con el poderoso V8 y el cambio secuencial, lo convierten en el arma perfecta para la Gymkhana. Su sonido, tan brutal como su aspecto, merece mención aparte.
El escenario tampoco se queda atrás, con las calles, los canales e incluso las autopistas de Los Ángeles como telón de fondo. Ni la mítica Mullholland Drive ha escapado a los 4 rodillos con los que el Mustang parecía querer arrancar el asfalto a su paso.
Pero para que contarte más, lo mejor es que tomes asiento, subas el volumen y disfrutes de los más de 10 minutos de espectáculo.