Poco a poco, se siguen desgranando detalles acerca de cómo serán los WRC27, los coches de rallies del mañana. Está claro que han de ser más sencillos, más baratos y menos 'galácticos' que los Rally1 actuales o los últimos World Rally Cars de 2017-2021. Pero ahora se conocen más datos acerca de un aspecto clave: el motor.
El marco WRC27 comenzará con lo que tenemos hasta el momento, motores de combustión tradicional alimentados por combustible sintético/sostenible, olvidándonos - por el momento - del elemento híbrido utilizado entre 2022 y 2024. En el futuro se prevé que haya un marco normativo común donde convivan, de alguna manera, motores de combustión convencionales, híbridos y eléctricos, a nivel de prestaciones equilibrado y siempre dependiente, por supuesto, del estado de la tecnología (no en 2027 sino más adelante, como es evidente).
Según ha declarado del delegado técnico de la FIA Xavier Mestelan-Pinon al medio DirtFish, los WRC27 comenzarán su andanza con motores de la misma especificación que los Rally2, rondando los 300 CV de potencia. Esto implica varias cosas: la primera, que Toyota, Hyundai y M-Sport ya cuentan con desarrollo, así como Citroën y Skoda, lo que implica un motor para todas las marcas de los grupos Stellantis y Volkswagen respectivamente. Es decir, estos motores relevarían, después de más de una década, a los 1.6 GRE (Global Race Engine), un concepto que nació tanto para rallies como el extinto WTCC (el antiguo Mundial de Turismos en la era TC1, antes de que se empezaran a utilizar los TCR) así como en Fórmula 3, en este caso un 2.0 atmosférico.
El paso de los GRE a motores de especificación Rally2 es clave para reducir el coste de los coches a 345.000 €, la cifra estipulada por la FIA - aunque Mestelan afirma que esto será para los coches con el kit de asfalto, pensando sobre todo en los que quieran correr en campeonatos nacionales. Según fuentes de Revista Scratch, el precio 'real' de estos WRC27 estará más bien sobre los 400.000 €.
Mestelan señala, además, que se estudia la introducción de un motor basado en coches de producción en serie, sin especificarse si sería un motor 'spec' o un concepto similar. No se ha aclarado aún si esta posibilidad funcionaría como lo que se hace en el Campeonato Británico de Turismos, donde M-Sport suministra el motor TOCA BTCC, un 2.0 turbo de 350 CV. Otros conceptos son los vistos en la IndyCar (con motores Chevrolet y Honda de similares prestaciones) o Super Formula (mismo motor, pero fabricado por Honda y Toyota con mismas prestaciones pero sonido diferente).
También parece que se unificarán los WRC27 y los Rally2 - es decir, competirían en la misma categoría, descartando los Rally1 (al contrario que en años 'de transición' anteriores donde podían correr los WRC antiguos con limitaciones). Esto implica que, en efecto, los Rally2 correrían en la clase 'principal', podrían luchar por podios y victorias absolutas e incluso títulos, aunque se entiende que los WRC27 tendrían ventaja al utilizar chasis tubular, un chasis diseño FIA común para todos los equipos.