Unos días después de su renuncia pública como vicepresidente deportivo de la FIA, Robert Reid ha vuelto a expresarse a través de las redes sociales. El ex copiloto campeón mundial de rallys, tras su dimisión, se encuentra de vacaciones "por primera vez en mucho tiempo", pero ha querido también detallar algunos aspectos y, de paso, agradecer todo el apoyo recibido.
Tras su renuncia, el mundo del motorsport ha puesto sus ojos una vez más en una FIA de la que se siguen yendo grandes talentos - ocurriendo además en el último año de mandato de la legislatura actual de Mohammed Ben Sulayem. El perfil de Reid es el más destacado, sin duda, en una FIA que continúa acumulando polémicas en los diferentes campeonatos sobre los que actúa, entre ellos el Mundial de Rallys y ahora, como promotor, del Mundial de Rallycross.
"Uno de los ejemplos más claros y preocupantes de este deterioro fue la internalización del Campeonato Mundial de Rallycross. Repetidamente expresé mis preocupaciones, tanto sobre el proceso de gobernanza como sobre las posibles implicaciones legales, y no recibí respuesta, a pesar de mis responsabilidades como representante electo y mis obligaciones fiduciarias. Finalmente, no tuve más opción que buscar asesoría y apoyo legal externo. "
"Solo entonces recibí una respuesta, pero lamentablemente carecía de la claridad y rigurosidad que había esperado. Me dijeron, en términos generales, que el proceso de gobernanza era sólido y que no había riesgo legal. Pero no se ofreció evidencia ni explicación alguna para respaldar esas afirmaciones. Como alguien responsable ante los miembros y expuesto a responsabilidad personal, eso simplemente no era aceptable."
Otro aspecto importante es la reunión del Consejo Mundial del Deporte del Motor de hace unas semanas, de la que tanto él como David Richards (miembro del WMSC también) fueron excluidos. Esta es la explicación que esgrime Reid, añadiendo el dato de que el correo suyo de la FIA fue desactivado diez días después de manera deliberada.
"También quiero abordar la reciente especulación en torno a la enmienda del Acuerdo de Confidencialidad (NDA). Apoyo plenamente la necesidad de confidencialidad y personalmente me ha frustrado profundamente la cantidad de filtraciones que socavan la confianza y la eficacia de la gobernanza. Un periodista me dijo que tal vez la FIA debería estar más preocupada por por qué la gente está filtrando que por quién lo está haciendo, y creo que vale la pena reflexionar sobre eso."
"No me negué a firmar la enmienda del acuerdo de confidencialidad. Simplemente solicité una breve prórroga para poder obtener asesoría legal sobre un documento complejo regido por la ley suiza, el cual fue presentado con un plazo relativamente corto. Esa solicitud fue denegada. Como resultado, fui excluido de la reunión del Consejo Mundial del Deporte del Motor, en mi opinión, de manera injusta e ilegal. Diez días después, se desactivó mi correo electrónico de la FIA sin previo aviso. Múltiples solicitudes de asistencia y explicación no fueron respondidas hasta que, tras una carta legal de mi abogado, se me informó que se trataba de una decisión deliberada."
"El liderazgo importa. La gobernanza importa. Y la confianza, una vez perdida, es difícil de recuperar. Si el automovilismo quiere seguir siendo creíble y prosperar en el futuro, debe ser gobernado no con control, sino con colaboración. No con silencio, sino con responsabilidad."
"Muchas personas han preguntado qué viene ahora. La verdad es que esto nunca se trató de un “siguiente paso”. Se trató de decir: esto no es lo suficientemente bueno, y no puedo seguir siendo parte de ello. Ese mensaje claramente ha calado hondo, con mensajes de apoyo recibidos de muchos clubes miembros de la FIA en todo el mundo, y un respaldo firme por parte de todos en el deporte. Por ello, estoy muy agradecido", finaliza Reid.