Twitter (@TheDDuran)
Toyota ha encontrado y solucionado el problema con el que se encontró Nasser Al-Attiyah durante el final de la primera etapa del Dakar 2017. La Hilux V8 del catarí prendió fuego debido a una pequeña fuga de aceite situada sobre el tubo de escape que se ha arreglado de cara a la segunda etapa.
Al-Attiyah llevó la voz dominante durante la etapa prólogo de treinta y nueve kilómetros, pero en los últimos diez comenzó a notar un olor a humo y fuego procedente de su montura. Tras terminar el recorrido cronometrado fue remolcado por Giniel de Villiers, llegando de esta manera hasta el bivouac en Resistencia.
“Era aceite de una junta que fue a parar al tubo de escape. Nada especial”, aseguró el máximo responsable de Overdrive Racing Jean-Marc Fortin según el medio Rallye-Sport. De Villiers, también en la misma estructura de Toyota Gazoo Racing, también tuvo un problema de temperatura durante el shakedown del sábado treinta y uno de diciembre.
De cara a la segunda etapa de 275 kilómetros cronometrados el catarí es el encargado de liderar el pelotón, seguido de los españoles Xevi Pons, Nani Roma y Carlos Sainz. Para pelear la victoria Al-Attiyah tiene la posibilidad de buscar un liderato firme antes de llegar a Bolivia, pues la altitud afectará al rendimiento del Hilux V8 atmosférico más que a lo motores turbo de los Mini John Cooper Works Rally o Peugeot 3008 DKR.