Carlos Sainz afronta la recta final del Rally Dakar con ilusión. El piloto de Peugeot tiene una hora de margen respecto a su compañero de equipo Stéphane Peterhansel y ahora quiere ir con cuidado, administrando la ventaja.
"La verdad es que contento porque este era uno de los días que estaba marcado como de los importantes de la carrera. Fiambalá es una etapa en la que siempre han pasado cosas, a mí personalmente, y pasarla como la hemos pasado, estoy muy contento, eso otro pasito más", comentó el español
"Sigo pensando lo mismo que ayer y que antes de ayer, solo que queda un día menos. Mañana tenemos una etapa de 520km, es una barbaridad y no sabemos aún cómo es. Al día siguiente quedan dunas, creo que hay que ser cauto, como hasta ahora y seguir pasando día a día. No va a cambiar mucho el discurso en ese sentido", añadió.
“Nosotros ahora mismo lo que tenemos que hacer es administrar bien la ventaja que tenemos y no tomar ningún riesgo", sentenció un Carlos Sainz que está cerca de conseguir su segundo Dakar.