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El piloto noruego Mads Ostberg, en una entrevista al blog WRC Wings, ha resaltado el gran avance que hubiera supuesto las evoluciones aerodinámicas del Citroën C3 WRC para este 2020, las cuales se vieron en diversos test a finales de 2019 – unas semanas antes de que la marca cortase su participación en el Campeonato Mundial de Rallyes. Se trataba de un gran paso al frente que hubiera convertido el coche en una bestia más competitiva frente a los Hyundai, Toyota y Ford.
Citroën realizó avances en su coche, sobre todo en materia de geometría de suspensión, tratando de darle a Sébastien Ogier un coche ganador. Durante toda la temporada llegaron mejoras, si bien la más espectacular fue esta revisión aerodinámica vista días antes del RallyRACC sobre asfalto, probada por Ogier y Esapekka Lappi. Ostberg también tuvo la oportunidad de probar estas actualizaciones en un test de tierra en Finlandia – el otro piloto que pudo ponerse a los mandos de este C3 WRC 2020 fue el nizardo Eric Camilli.
Pese a la inversión de la marca de los dos chevrones, no estuvieron a la altura en el mundial de constructores y Ogier perdió la pelea frente a Ott Tänak y Thierry Neuville, sentenciada por un problema de dirección asistida nada más empezar el RallyRACC. Esto llevó a una reacción a través de las redes sociales de su esposa, la presentadora de televisión alemana Andrea Kaiser, que creo un verdadero terremoto y dio lugar a los primeros rumores de la marcha de Ogier – un mes más tarde Ogier marchaba rumbo a Toyota y Citroën decidía dejar el WRC.
Ostberg estuvo dentro del equipo durante la temporada 2018, convirtiéndose en piloto oficial tras el despido de Citroën a Kris Meeke – el noruego venía de pilotar de manera privada el Ford Fiesta WRC, un coche que según sus palabras tenía más apoyo aerodinámico en la parte delantera. Por tanto estuvo presente durante el desarrollo de un coche, encontrándose a finales de 2019 con una auténtica bestia, mostrando una opinión similar a la que expresó meses atrás Lappi.
“Estuve haciendo test varios días en Finlandia con el coche, era un gran paso adelante especialmente en eventos de ese tipo. Es una pena que nunca viéramos el nuevo conjunto aerodinámico compitiendo en una prueba porque pienso que hubiera sido un gran paso para el C3 WRC, así que fue una pena”, declaró Ostberg en la entrevista al citado medio.
“La mayor diferencia estaba en el tren delantero pero también había una gran diferencia en el trasero. No era tan visible pero aún así era masivo. La parte delantera estaba mucho más pegada a la carretera, más reacción en el coche, mejor equilibrio en los saltos también, seguía las lomas mucho mejor, era un gran paso de desarrollo para el coche”, añadió.
Es preciso mencionar que Ostberg dedicó buena parte de 2019 a desarrollar el C3 R5, coche que acabó el año siendo mucho más competitivo gracias a una actualización del puente trasero y un cambio en el rake del coche que optimizaba el flujo aerodinámico. Cuando esta temporada 2020 se retome, el objetivo suyo será el de llevarse el título con Citroën en la categoría WRC2 frente a sus rivales de Hyundai y M-Sport.
