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Freddy Loix sigue siendo \"Mister Ypres\". El piloto belga se vuelve a llevar, por novena vez, el rallye de su país puntuable para el ERC (European Rally Championship) por delante de su compatriota Cedric Cherain y del piloto oficial de Skoda Sepp Wiegand.
Si bien es cierto que los incidentes sufridos por principales rivales le pusieron en bandeja la prueba, no hay que olvidar que Loix siempre estuvo en los tiempos de la cabeza. Su Skoda Fabia S2000 de carácter privado se comportó a las mil maravillas, siendo una herramienta de trabajo más que digna y demostrando que sigue siendo una montura tremendamente rápida en los tramos belgas.
Por detrás, Cedric Cherain consigue un podio europeo que le sabe a victoria. El piloto belga no pudo acercarse a un Loix que, desde el momento de la rotura de Kevin Abbring y su Peugeot 208 T16, se dedicó a controlarlo para que no se pegase a él en exceso. Sin embargo, y para un piloto no habitual al certamen intercontinental, una segunda plaza tiene un sabor de lo más dulce que permite además a Bélgica gozar de un doblete en los tramos patrios.
Por su parte, sí que es cierto que se esperaba mucho más de Sepp Wiegand. Su carácter de piloto privado no le hizo ser inmune a las acometidas tanto de pilotos privados (Luca Rossetti por ejemplo, que de no haber sido por su salida de pista hubiese sido un rival a batir), ni a los oficiales (todos estuvieron por delante de él hasta que se retiraban por problemas mecánicos o salidas). El alemán tendrá que apretar, y mucho, para acercarse a los tiempos de los de arriba, aunque se vaya de Bélgica con un podio más para su palmarés en el ERC.
Cerraban el Top 5 un Hermen Kobus (Ford Fiesta S2000) bastante rápido durante todo el fin de semana, además de un Luca Rossetti tan espectacular en sus tiempos como en su conducción. Entre los R4, la victoria era para un Andy Lefebvre arrollador con su Mitsubishi Evo X.