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El equipo leonés sigue sacando a los tramos nacional más monturas de la categoría N5. Una vez más, el Rallye Princesa de Asturias será un hervidero dentro de la categoría N5 y más en concreto en lo que se refiere a la copa N5 que gestiona RMC. Un trofeo mixto creado para dar cabida a todos los coches de esta categoría fabricados en los talleres de Caboalles y que goza de suculentos premios económicos.
Así pues, en la prueba asentada en Oviedo veremos el debut dentro de nuestros tramos de una de las últimas creaciones de Roberto Méndez: el Nissan Micra N5. Un coche con el que él mismo ya había estado en los tramos del país vecino, aunque disputado el Rali de Santo Tirso ejerciendo las labores de coche cero, En el Princesa, José Luis Cuesta y Jandrín López serán los encargados de tripular a esta curiosa unidad.
Para Cuesta, este Princesa será su tercera participación consecutiva dentro del rallye asturiano con coches de esta categoría, ya que en las dos ediciones anteriores ya había estado compitiendo con un Ford Fiesta y un Renault Clio. Ahora, para seguir experimentando en 2019, el español ha decidido tantear una de las unidades más exóticas de las salidas de RMC y que por el momento menos aceptación han tenido en las carreras.
De las quince unidades de la categoría que veremos en el Princesa, doce de ellas han sido desarrolladas por el equipo de Roberto Méndez, mientras que solo tres han salido del equipo gallego AR Vidal: los dos Suzuki Swift oficiales y el VW Polo, que para la ocasión, volverá a ser pilotado por Alberto Ordóñez, quien ya la pasada temporada completó unos más que interesantes cronos en los tramos del Principado.