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Su aterrizaje en el CERA fue anunciado a bombo y platillo – lógico ya que detrás de este novedoso programa existe cierto apoyo de una marca-, es por ello por lo que muchas miradas se han centrado en el pequeño vehículo italiano, siguiendo paso a paso su desenvolvimiento en esta primera mitad de temporada. La progresión sí ha sido real, y a la vez muy buena.
Empezaron la temporada en Córdoba muy lejos de su objetivo real, pues esperaban ser el primer vehículo no R5 en la clasificación final del rallye. En la cita andaluza, luego de una carrera con multitud de infortunios, lograban terminar, aunque en la posición número diecisiete, siendo superados por un buen número de vehículos como: R2, R3T…y por supuesto, los R5.
Tras la primera toma de contacto, el equipo madrileño y la carismática dupla gallega, formada por el joven Álvaro Muñiz y el experimentado Antonio Solórzano, llegaron a las Islas con el objetivo de seguir aprendiendo y desarrollando un coche que llegó muy verde. Las cosas no empezaron bien en Canarias, sumando el primer, y único hasta el momento, abandono de la temporada.
En Adeje y Ourense, la progresión se fue confirmando, ya que lograban concluir ya dentro del ‘top ten’ en ambas carreras. En la cita canaria terminaban en décima posición, mientras que en Ourense, lograban escalar hasta la octava plaza. Siguiendo con este incremento de prestaciones, en Ferrol obtenían su mejor resultado logrado hasta el momento.
Una sexta plaza, a las puertas del quinteto inicial, y siendo sólo superados por los R5 y los N5. Así pues, conseguían dejar a los R2 a más de dos minutos, luego de que en Córdoba el mejor de esta categoría lograse ser más de tres minutos más rápido que ellos. Así pues, en el periplo gallego, el equipo de la marca italiana ha confirmado su progresión, abriendo las expectativas de hasta donde podrán llegar.
El buen trabajo realizado ha sido tal, que incluso desde Italia no han dejado escapar la oportunidad de venir a España para tomar nota, con el objetivo de seguir mejorando el resto de unidades que compiten a lo largo de la geografía europea. El periplo asturiano será una nueva oportunidad para ellos, y para comprobar si el trabajo realizado en verano ha dado o no sus frutos.
Tras el rallye de Ferrol, Muñiz ha logrado situarse al frente del apartado de dos ruedas motrices, superando al Swift S1600 de Adrián Díaz, que suma ya dos abandonos en lo que va de temporada. Además, el 124 se sitúa en la séptima plaza de la general por puntos, a menos de un suspiro de los Suzuki Swift N5 de Joan Vinyes y Gorka Antxustegi.
De esta manera, el objetivo de ser el primer vehículo no R5, planteado por el propio Álvaro Muñiz antes del inicio de las oscilaciones, no está posicionado tan lejos, ya que la quinta posición de la clasificación, ocupada por el piloto andorrano de la marca Suzuki, se encuentra a escasos quince puntos de la que toma el piloto coruñés.