Llegaba la quinta prueba para los pilotos del europeo encuadrados dentro de la categoría Under 28. Pepe López y Borja Rozada salían como segundos clasificados, y con la esperanza de consolidar esta buena posición siendo el piloto más joven mejor clasificado.
El terreno a priori era propicio. Sobre el asfalto de los tramos romanos, el piloto español podía dar el nivel que estamos acostumbrados a ver en él, y así pudo ser. Al inicio de la prueba -después de disputar la especial urbana de Roma, un trámite para los pilotos- ya en la jornada del sábado, Pepe tomaba el mando siendo el mejor en su categoría, marcando el scratch en el segundo y tercer tramo y colocándose líder, pero un problema mecánico le hacía abandonar en la cuarta especial del rallye. El ritmo de Pepe y Borja era muy alto y se estaban consiguiendo los resultados deseados, pero este infortunio les dejaba fuera de toda lucha por la victoria.
Aunque la intención del equipo era poder reengancharse en “súper rallye” en la jornada del domingo, una avería en la caja de dirección volvía a dejar fuera de carrera al piloto madrileño, que tan solo pudo rodar unos kilómetros, dejando la prueba definitivamente.
Pepe dejaba unas declaraciones al final del rallye: “Fue una fuga de aceite el sábado, cuando estábamos llevando un buen ritmo, siendo capaces de luchar por la primera posición en ERC Júnior U28. Pero con todo el humo era imposible pilotar y decidimos parar. Cuando pudimos volver a la pista era demasiado tarde. Y el domingo por la mañana tuvimos el problema con la caja de dirección y no había nada que pudiéramos hacer para continuar. Lo siento por el equipo porque trabajaron muy duro el sábado por la noche para arreglar el auto. Ahora tenemos que dejar Roma atrás y mirar a Letonia, donde buscamos un buen resultado sobre tierra para decir adiós a una temporada difícil”.
La última prueba será Rally Liepája en Letonia el 6–8 de octubre, siendo sobre tierra.