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Pese a no ser el último del calendario como sucedía con el viejo formato del IRC, el Rally de Chipre sigue siendo una prueba determinante para la decisión del campeonato intercontinental. Atrás quedan, desgraciadamente, aquellos finales de infarto -a todos nos viene a la mente la edición de 2011 que decidió el absoluto y el dos ruedas motrices a la vez y ambos por menos de dos puntos de diferencia-, pero por delante quedan dos pruebas apasionantes y la traca final: Chipre, Grecia y Suiza. Los dos primeros siempre han sido considerados dos de los más duros del mundo, ambos cuando puntuaban para el WRC; el último es uno de los más bonitos y espectaculares a nivel de tramos, que bien pueden llegar a recordar a aquellos bonitos pasos de Córcega.
La sorpresa y noticia del rally es que Craig Breen no estará allí presente. Kajetanowicz, que sí estará, es líder con 23 puntos sobre el irlandés, que tiene el campeonato casi perdido. Kajto tiene muchas posibilidades de llevarse un campeonato que ha bordado desde la primera carrera hasta la última. Y es que, hasta la fecha, pocos han sido capaces de hacerle clavar la rodilla en el suelo.
Los motivos de la ausencia de Breen en Chipre parecen apuntar a una apretada agenda que ya no puede compaginar ERC y WRC. Peugeot, Craig o en manos de quien esté, parece ser que no le da prioridad al campeonato intercontinental, lo cual tiene su sentido si se piensa correr el mundial el año venidero. Sea como fuere, el piloto patrocinado por la petrolera Lotos tiene una oportunidad de oro para cerrar un año de ensueño. Una victoria aquí dejaría el campeonato casi, casi sentenciado a su favor.
95 kilómetros separán este fin de semana a los pilotos de la meta, de la tranquilidad de llevar el coche sano y salvo al parque cerrado de Nicosia. Casi un centenar de trampas, de alternancia entre asfalto abrasivo y tierra dura. Quien venza este fin de semana, desde luego, no será de suerte. Y, por si fuera poco, el mantel de pilotos se comparte entre el ERC y el MERC, lo cual acentúa la intensidad de la prueba antes incluso de empezar.
Damas y caballeros, el espectáculo y la lucha están servidos.