Víctor Senra retorna a su hábitat natural. El piloto de Dumbría se repone de forma brillante al aparatoso accidente que truncó su racha de triunfos hace unas semanas en Cantabria. El 53º Rallye de Ferrol asistió a otra demostración de poderío del, de nuevo, líder de la Copa de España de Rallyes de Asfalto. El de RaceSeven, al volante de un Skoda Fabia Rally2 Evo diferente al suyo, arrasó con sus rivales en los tramos de su Galicia.
Además de adjudicarse todos los puntos en oferta, el de Dumbría completó un abrumador pleno de scratchs en la ronda que marcaba el ecuador del certamen. La segunda mitad de la temporada la afrontará con la calma que otorga su rápida recomposición. Nada ha cambiado en él. Domina de principio a fin con unas diferencias amplísimas sobre el resto. Su condición de favorito al título la ha reforzado con contundencia.
El principal foco de emoción de la cita gallega se centró en la batalla por las otras dos escalones del cuadro de honor. Numerosos equipos aspiraban a un peldaño de podio, pero solo Javier Pardo y Jorge Pérez lo consiguieron. El representante de MRF Tyres en el Europeo regresó a su casa, el equipo Suzuki Motor Ibérica, y dirigió un Swift R4LLY S al que no se montaba desde el pasado año a una sobresaliente segunda plaza.
El del Skoda Fabia R5 ascendió al tercer lugar en el último suspiro. José Luis Peláez, también a los mandos de un vehículo de la firma checa, partía a la cronometrada final en ese puesto tan cotizado. Su ventaja con el de Congostra Team Sanxenxo era ínfima, de poco menos de dos segundos. Aunque lo intentó, el madrileño no pudo contener a su perseguidor, descendiendo a una agridulce cuarta posición por apenas tres décimas.
La mecánica volvió a cebarse con Álvaro Muñiz. Ninguna de sus participaciones con el Hyundai i20 R5 ha estado exenta de contratiempos. El coruñés tuvo que trabajar al término de cada especial con el manguito del turbo del artefacto surcoreano. Como mal menor, el de One Seven pudo cruzar por meta y salvar un quinto puesto. El andorrano Joan Vinyes, con menos fortuna, abandonó por una avería en su Suzuki Swift R4LLY S.
Pablo Rey concluyó sexto con su Suzuki Swift Sport R+ N5, justo por delante del sorprendente Fernando Rico, quien no se acomplejó para superar a monturas más prestacionales que su BMW M3 de propulsión trasera. Roberto Blach, octavo, se impuso entre los tracción delantera con su Peugeot 208 Rally4. Daniel Berdomás (Toyota GR Yaris N4) y Óscar Palacio (Ford Fiesta Rally2), en ese orden, cerraron el top diez de la general.