Meses atrás, el director deportivo de M-Sport Richard Millener afirmaba a Revista Scratch que continuar con Ford era la prioridad máxima para M-Sport en el Mundial de Rallies, de cara a la nueva era que comienza en 2027. Estos WRC27, o como se acaben llamando, están llamados a devolver al WRC a una era más parecida a la popularidad que alcanzó con los Grupo A.
Uno de los grandes problemas de Ford es la elegibilidad de modelo: más allá del Puma, todos sus modelos son demasiado grandes y/o son eléctricos, como el Puma Gen E, el Explorer, el Capri, el Mustang Mach E o el futuro Bronco que se fabricará en Almussafes. Habrá Ford Fiesta para 2028, pero en teoría será también eléctrico, basándose en la plataforma AmpR Small de Renault para rellenar ese hueco que ellos mismos borraron hace años.
Este reglamento permite hacer coches a medida, lo que permite un sinfín de posibilidades. Sería bonito, sin duda, una reinterpretación moderna del Ford RS200, pero parece que en Dovenby Hall esa idea no es la que tienen entre manos. Tienen otras opciones, incluyendo una 'radical' que Millener quería poner sobre la mesa.

Dentro de poco, el Ford Fiesta Rally2 (basado en un coche que no se fabrica desde hace dos años y medio) dejará de tener homologación vigente. Ford, mientras tanto, se adentra de nuevo en la Fórmula 1 junto a Red Bull Racing, compite con M-Sport en el Dakar, corre en NASCAR, en diferentes campeonatos GT3, construirá un Hypercar LMDh para el Mundial de Resistencia en 2027... básicamente, está en todo, menos la disciplina donde tiene grandes raíces históricas.
Ahora bien, no es un reglamento sólo para marcas, también para preparadores. Y M-Sport (al igual que Prodrive, por ejemplo) puede aliarse con alguien más. Y esa respuesta puede estar en...efectivamente, el gran mercado emergente: China.
Según varios medios angloparlantes y francoparlantes apuntan a una alianza de M-Sport con el grupo Geely, quienes hasta ahora han competido en el WTCR y TCR World Tour con sus Lynk & Co 003 y han ganado 9 títulos mundiales en siete temporadas, incluyendo en esta temporada 2025. Lynk & Co ha competido junto con Cyan Racing (la 'antigua' Polestar, digamos), con mucho pedigrí en turismos junto a Volvo.

Ahora bien, Geely no es sólo Lynk & Co, Volvo (cuyos modelos clásicos siguen siendo muy rápidos en rallies históricos/regionales en el norte de Europa) o Polestar. Es también Lotus, quienes están volviendo a la combustión tras años apostando todo al eléctrico. Es también Smart, en este caso junto a Mercedes, además de otras marcas como Zeekr y otra con pasado en rallies: Proton.
Tampoco sería la primera vez: recordemos que M-Sport ya se asoció años atrás con Bentley para el desarrollo y mantenimiento de sus Continental GT3 para carreras de Sprint y Resistencia. Geely, además, colabora con el Grupo Renault a través de Horse, la división de motores de combustión que, entre otros motores, fabrica en Valladolid los HR13 que se montan en los Renault Clio Rally3, Rally4 y Rally5.