Hace 30 años, Walter Röhrl y Audi fueron capaces de conseguir la victoria en la Subida a Pikes Peak, utilizando un Audi Sport Quattro S1 que desataba hasta 600 caballos hacia el suelo. Röhrl no sólo fue capaz de bajar de la marca de 11 minutos, sino que batió a Ari Vatanen, quien representaba a Peugeot aquel año con un Peugeot 205 T16 E2.