La Copa Suzuki se desplazaba a tierras portuguesas para celebrar su segunda cita de la temporada, el Rallye de Castelo Branco. En el asfalto luso hasta 15 equipos se habían inscrito en la monomarca japonesa, en una prueba en el que las neutralizaciones dejaron casi en blanco a los competidores, realizando únicamente dos tramos el sábado y otros dos el domingo.
En este caos reinó el bueno de Diego Félix, que acompañado por Mario Javier del Riego se impuso por la mínima entre los Swift, ya que en la última especial, el junior, Diego Ruiloba, con Andrés Blanco a su derecha, conseguía recortar la diferencia entre ambos a tan sólo dos décimas de segundo.
El podio de la Copa Suzuki lo completaban Aingeru Castro y Alaitz Urkiola a tan sólo 3.7 segundos, demostrando que los escasos de kilómetros competitivos de esta prueba hicieron que se convirtiera en un “rallysprint” decidido a la décima. Tras ellos, las duplas Fernández-Arranz y Canales-Serrano cerraron el Top 5 de la copa de promoción de Suzuki.
De esta segunda prueba del año se sale con David Cortés, que finalizó octavo en Portugal, en primera posición del campeonato con 34 puntos en su casillero, uno más que Juan Carlos Fernández. La próxima cita de la Copa Suzuki será el Rallye de Ourense a finales de julio.