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Hijo de piloto de rallyes, Xavier Pons i Puigdollers, más conocido como Xevi Pons, lleva desde bien pequeño la gasolina en la sangre. Aunque comenzó compitiendo en moto y cosechó varios triunfos en la modalidad de Enduro, pronto se volcaría de lleno en los coches. Pons debuta en rallyes en 2002, especialidad en la que ha conseguido ser campeón del mundo de S2000 (2010) y tricampeón de España de rallyes de tierra (2008, 2012 y 2013). Pero el próximo enero se enfrentará a la que, quizás, sea la prueba más exigente y difícil de su carrera profesional, el Dakar. Más aún, tras superar una grave lesión vertebral que se produjo el pasado mes de abril y que le ha tenido parado unos seis meses. No obstante, Xevi Pons afronta esta “loca” aventura con ganas, confianza e ilusión.
- Bueno, en primer lugar, ¿cómo se encuentra tras el accidente de Bolivia? ¿Está recuperado al 100%?
- Si, estoy bien realmente. Hace ya siete meses del accidente y estoy recuperado, pero aún me falta un poco para estar como a mí me gustaría, para estar al 100%. Aún, tras los entrenamientos, se me carga un poco la espalda y esto me da un poco de respeto porque son muchos días de competición. Por lo tanto, es una incógnita ver cómo iré respondiendo en el día a día.
- ¿Cree que el no estar al 100% le puede llegar a pasar factura durante la prueba?
- Claro, es todo nuevo para mí. Para correr un rally estoy bien, pero para correr el Dakar, una prueba con tantos kilómetros, tanta exigencia y de tantos días, no lo sé. La fractura está bien soldada y muscularmente hemos trabajado muy duro para llegar lo mejor posible, pero también hay que ser realista porque para recuperarse de una lesión de este tipo se suele tardar unos seis meses y hace siete que tuve el accidente. No obstante, creo que voy bien preparado aunque, repito, no como me gustaría.
- ¿Correr el Dakar es el mayor reto al que se ha enfrentado en su carrera deportiva?
- Bueno, es un reto importante ya que es la carrera más dura y encima voy a disputarlo después de una lesión muy grave, la más grave que he tenido y, encima, con el hándicap de que sólo he podido probarlo dos días y no he hecho nunca nada de arena. ¡No sé ni lo que es una duna! No he hecho ningún test sobre arena y para afrontar el Dakar de esta manera hay que ser valiente.
- ¿Cómo ha sido la adaptación al Ford Ranger? ¿Le ha costado mucho?
- No, la verdad es que estoy contento porque la sensación que he tenido es que me he adaptado bastante rápido. Pero el Ranger es un coche que pesa mucho, tiene muchas más inercias y no tiene tanta potencia como los de rally. Creo que me he adaptado bien y rápido aunque no me gusta el comportamiento de la suspensión, que va mucho de punta en los saltos y trazados rotos pero, por lo que me ha comentado Nani Roma y más pilotos que han corrido el Dakar, es el problema que tienen casi todos los coches, que al pesar mucho cuando viene algún salto suelen caer de punta.
- ¿Esta es la primera carrera de raids que hace?
- Sí, nunca he competido en rally raids. Ni tan siquiera he hecho una carrera del nacional, por lo tanto para mí es un reto importante, una aventura. Pero creo que lo podemos hacer muy bien. Esa es mi idea, hacerlo lo mejor posible.
- ¿Le causa algún tipo de temor el no haberse enfrentado a ninguna duna y el exponerse a altitudes que superan los 4.000 metros?
- No, evidentemente el temor más grande son las dunas porque nunca he pasado por ninguna y no sé cómo lo haré. Me dan mucho respeto, pero por suerte las dunas llegan la segunda semana y espero afrontarlas con más rodaje y más experiencia acumulada. En el tema de la altura, estamos trabajando en ello estos días y parece que he tenido una buena adaptación a ella. Pero para mí, estar en la salida con un buen equipo y un buen coche ya es una victoria.
- ¿Además de los test en Portugal, cómo ha completado su preparación?
- Hemos trabajado mucho con la cámara hiperbárica para comprobar cómo reacciono en situaciones en las que esté expuesto a mucha altura. Para que el cuerpo se acostumbre. También hago trabajo de gimnasio y he musculado mucho la espalda, sobre todo la zona de lumbares y cervicales. Todo lo que he podido hacer, lo he hecho.
- ¿Cree que su falta de experiencia se puede compensar con el bagaje de Ricardo Torlashi?
Si, claro. Él tiene mucha experiencia y ha corrido muchas veces el Dakar, además es argentino y conoce la zona. Todo esto es una garantía. Es muy buen mecánico y para mí eso es una tranquilidad. Aunque, bueno, todo lo que conozco de Ricardo es por teléfono y tenemos que conocernos y adaptarnos.
- ¿Cuál es el principal objetivo que se ha marcado?
- El de llevar el coche a la meta. Es el primer año, me falta la experiencia y por eso, el principal reto es llegar a la meta. Lo importante es poder sumar kilómetros y experiencia. Una vez que conozca mi ritmo y el funcionamiento del coche, seguramente, saldrá alguna etapa buena. Esta es la idea, pero sin ir a buscarlo, porque si lo buscas puedes cometer errores. Voy a ir a mi ritmo, terminando cada día y por mi rapidez en rallyes debería hacer alguna etapa buena. Pero bueno, si no la hago, pues no la hago. Cada día va a ser como un test para mí, pero no se dónde voy a estar, aunque intentaré quedar entre los 20 o 30 primeros de la general y todo lo que venga de más, bienvenido sea.
- ¿Cómo surge la idea u oportunidad de correr el Dakar?
- Pues en 2011 ya estuvimos a punto de ir con el equipo Nupel, con Luis Moya de director deportivo e incluso probamos algún coche pero al final no pudo ser. Y bueno, el año pasado estuvimos mirando con Raúl Romero, que es el que ha hecho realidad este sueño, y finalmente este año ha podido ser. Se ha cerrado un poco tarde y no he podido hacer ningún raid para ver cómo funciona el roadbook y comprobar mi ritmo, pero bueno, es una suerte que lo hayamos podido cerrar.
- ¿El Dakar lo va a tomar como una aventura pasajera o como una costumbre?
- Mi idea no es ir a hacer sólo este Dakar, es hacer alguno más, a no ser que por algún motivo no lo haga más. Pero mi idea es seguir corriéndolo, coger este año experiencia e intentar hacerlo bien de aquí a dos o tres años. A ver si somos capaces de terminar este año para tener un programa mejor en 2017.
- ¿En sus viajes a Sudamérica, ha visitado alguna zona por la que pasa la prueba?
- El año pasado estuve por la zona de San Juan donde hicimos unos cursos y pasé por una pista donde se quedó bastante gente la pasada edición, que había ríos secos y muchos baches. Al menos algo he visto, algo sé, pero poco, es todo nuevo para mí. Yo lo afronto como un reto medio loco.
- De cara a la temporada 2016, ¿tiene algún proyecto cerrado?
- Tengo varias ideas, pero aún no hay nada cerrado. Me gustaría seguir corriendo en rallyes, porque a día de hoy es lo que me gusta y estoy luchando por ello, pero no tengo nada cerrado. Ahora estoy centrado en el Dakar y, a ver, si para febrero tenemos cerrado algún programa de rallyes conjuntamente con algo de raids. Seguramente correré algún rally, no sé si del mundial o del campeonato de España. Mi intención es estar en el mundial pero si no puedo, pues iré bajando y, bueno, el nacional de tierra es para mí un campeonato muy bonito y donde disfruto mucho.
- Cambiando de tema, ¿cómo va el proyecto de la academia?
- Bien, muy bien. Estoy muy contento. Estamos trabajando mucho. Ahora han terminado todos los campeonatos y hay algo de parón, pero para febrero ya tengo un planning preparado y hay varios pilotos interesados en hacer alguna carrera por aquí, por Europa. Tengo una agenda de cursos importante.
