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Los pilotos españoles participantes en el RallyRACC han tenido una jornada bastante positiva en la primera etapa de la prueba, la única que se celebra sobre tierra y la última que se disputará antes de la conversión a asfalto puro para 2021. La representación nacional ha tenido una etapa en la que se ha mostrado un gran nivel, tanto en la parte alta de la clasificación como en otras categorías.
En la primera línea de fuego, Dani Sordo y Carlos del Barrio han continuado con un trabajo sensacional a los mandos de su Hyundai i20 Coupé WRC, llegando a liderar el rallye en la primera mitad del día. La dupla de Hyundai Motorsport ha estado manteniendo la posición hasta el último tramo de la jornada (el más largo de todo el rallye con casi 39 kilómetros cronometrados), donde Sébastien Loeb ha hecho gala de su experiencia. En la general Sordo y del Barrio están en tercera posición a menos de 8 segundos de la cabeza, formando parte del tridente de Hyundai que busca asegurar el mundial de marcas.
Nil Solans, junto con Marc Martí a su diestra, comenzó con esa vitalidad que le caracteriza, situándose al frente de la categoría WRC2 a los mandos del Volkswagen Polo GTI R5, un coche que salvo en los test previos al evento nunca antes había pilotado. La mala fortuna le llegó en el TC-3, donde tuvo un pinchazo al principio del tramo y otro al final, lo cual le relegó 8 minutos en la general. Por la tarde continuó con un ritmo muy similar al de pilotos como Kajetan Kajetanowicz, Eric Camilli o Nikolay Gryazin, quienes han estado casi todo el año corriendo en la categoría. En el TC-5 marcó el tercer mejor tiempo mientras que en el TC-6 solo Camilli logró batirle – de hecho, al final del día se quedaba a 8 minutos del líder, Pierre-Louis Loubet, por lo que sin esa sangría en la primera pasada por La Fatarella estaría en liza por la victoria.
Por su parte, José Antonio Suárez y Alberto Iglesias han sabido estar también peleando en tiempos respetables, teniendo en cuenta que es su primer y único rallye mundialista de la temporada en un nivel donde el rodaje continuo al más alto nivel lo es todo. Una no del todo acertada decisión con las montas unido a problemas de frenos le relegaron en los tres tramos de la mañana, situándose en la zona media de WRC2. A base de aguantar mientras otros rivales caían por el camino, el de Pravia terminaba la jornada en novena posición de la categoría, con el prospecto de poder escalar más puestos aún con el paso al asfalto.
Jan Solans y Mauro Barreiro, los campeones del JWRC este año, afrontaban su primer rallye con un R5, una prueba de aprendizaje en la que poco a poco se han ido haciendo a los mandos del Ford Fiesta R5 MKII. En el TC-2 se veían relegados por un trompo, pero aún así (y sin obcecarse por los tiempos de cabeza) la velocidad era más que evidente, logrando mejores marcas que hombres con más experiencia a los mandos de los R5 de cuatro ruedas motrices.
Por detrás, ya dentro de los pilotos no prioritarios, Francisco López (con Borja Odriozola como copiloto) tenía su primera cata de los tramos mundialistas a los mandos de uno de los Ford Fiesta R5. Para el piloto murciano se trata de un aprendizaje forzoso, ya que el Rallye de Granada que disputó apenas una semana antes del RallyRACC fue su debut en tierra.
Entre los Dos Ruedas Motrices, la suma de la Peugeot Rally Cup Ibérica y la Beca Junior R2 unía a un gran plantel de nombres españoles haciéndose un hueco de cara al futuro. La actuación más sólida venía de parte de Pep Bassas/Axel Coronado, quien realizaba una gran etapa de principio a fin con el Peugeot 208 R2 de GC Motorsport para conseguir de manera matemática el título de campeón de la Beca Junior R2. Sus rivales más directos, Sergi Francolí/María Salvo, también se mostró muy competitivo, si bien su jornada quedó marcada por un pinchazo en la rueda delantera izquierda a doce kilómetros del final del tramo de La Fatarella en un traicionero interior.
El favorito para alzarse como ganador de la Peugeot Rally Cup Ibérica, Daniel Berdomás (junto con David Rivero), tuvo una mañana ardua con un pinchazo en uno de los primeros tramos y un susto en La Fatarella, pues el latiguillo del freno delantero derecho fallaba y su 208 R2 se volvía más inestable en frenada, quedándose lejos de los puestos de delante. Entre los españoles con 2RM Bassas quedaba como el más rápido, siendo segundo el joven Delbin Garcia junto con Cándido Carrera, Iago Gabeiras/Jandrín López, José Luis Peláez/Rodolfo del Barrio y Francolí/Salvo. Berdomás/Rivero, Miquel Labarias/Jordi Sánchez, Santi García/Néstor Casal y Ramón Cornet/Dani Noguer completaban las posiciones restantes.