Sébastien Ogier ha tenido un fin de semana para olvidar. El que llegaba como líder y ganador del Rallye de Monte-Carlo sufrió salir de los primeros en estas condiciones de nieve: “En general, ha sido un fin de semana difícil. Intentamos todo lo que pudimos, pero sabíamos que venir aquí como líderes del campeonato sería un rally difícil”, dijo Ogier.
En el TC-8 del sábado, a 100 metros de la meta, Sébastien Ogier golpeó con el frontal un banco de nieve, lanzándolo hacia el lado opuesto y anclando un Toyota Yaris que no pudieron sacar hasta más de quince minutos después: “Aun así, luchamos duro, pero este pequeño error de ayer en la etapa final del día obviamente también fue muy costoso y nos sacó de la pelea. Con nuestra posición de salida, no teníamos muchas esperanzas para el Power Stage. No pude hacer más, estaba al límite y todavía había mucha nieve, pero fue bueno anotar un punto al menos”, explicó.
A pesar de solo lograr un punto, Sébastien Ogier se mantiene tercero de la general con 31 puntos, siendo superado por Thierry Neuville (35 pts), y se encuentra a ocho puntos de su compañero de equipo y líder de la general de pilotos, Kalle Rovanperä.