Sébastien Ogier afronta la cuarta y última etapa del Rallye de Monte-Carlo como líder de la general. El piloto de Toyota tiene una ventaja de 13 segundos respecto a su compañero de equipo, Elfyn Evans. Ambos se disputarán mañana la primera victoria de la temporada.
Ogier se mostraba satisfecho con sus resultados en la primera etapa del día: “Ha sido un buen día, aunque no perfecto. La primera etapa ha ido muy bien en condiciones súper complicadas. Realmente presioné fuerte, así que estaba contento por terminar y no haber cometido ningún error ”, dijo el piloto francés.
Las condiciones empeoraron conforme pasaban las horas. Ogier considera que “fue muy difícil para todos”, calificando a las condiciones de la pista como “realmente extremas”. El actual líder asegura haber perdido tiempo en el décimo tramo cronometrado: “El segundo tramo del día fue mucho más difícil para nosotros. Las condiciones eran realmente extremas y no tenía absolutamente ningún agarre, y perdimos bastante tiempo en comparación con el resto de pilotos de la cabeza. Quizás tampoco hicimos el trabajo perfecto con la gestión de los neumáticos, pero son nuevos y todavía estamos aprendiendo sobre ellos”, dijo Ogier sobre los nuevos Pirelli.
En el último tramo, Ogier recuperó esas sensaciones de la mañana y volvió a ser rápido, aunque le terminó superando Elfyn Evans: “En la etapa final, las condiciones habían cambiado mucho, pero para mí fue bastante bien”. Mañana se juega la victoria en Monte-Carlo, y para Ogier lo más importante es mantener ese liderato: “Lo más importante es que ahora estamos líderes y tenemos que mantenerlo".