Ott Tänak ha logrado lo impensable en la segunda jornada de competición del Rally de Finlandia. El piloto de Hyundai marcha por delante de los cuatro Toyota GR Yaris Rally1 en sus carreteras de desarrollo. Aunque no se ha sentido cómodo en ningún momento con el comportamiento del coche, el estonio ha asumido unos riesgos extremos que le valen un valioso liderato en la octava ronda del Campeonato del Mundo de Rallyes.
"Estaba mentalizado en que iba a sufrir". Tänak sabía de antemano que el artefacto producido en Alzenau no sería el mejor para luchar por el peldaño más alto del podio en el '1000 Lagos'. Adaptar su planteamiento a lidiar con un coche inferior al de sus rivales podría parecer derrotista, pero todo lo contrario. Tänak ha mostrado su versión más hambrienta en unos bosques que ya ha consquistado en dos ocasiones.
Esapekka Lappi se ha encargado de añadir emoción y cortar las alas a su predecesor en el bucle de la tarde. El finlandés, frustrado por no conseguir rebajar las marcas de su predecesor, cerró el día con tres scratchs consecutivos que le sitúan a un suspiro de la batuta de mando. Sus compañeros Elfyn Evans y Kalle Rovanperä han intentado no descolgarse de la lucha por el triunfo, pero tendrán que remontar mañana veinte segundos.
Craig Breen ocupa la quinta plaza después de sufrir un fuerte aterrizaje que afectó a un componente mecánico de su Ford Puma Rally1. Su objetivo de terminar dentro del cuadro de honor se complica. Muy cerca del irlandés rueda un Takamoto Katsuta que ha abierto brecha con Thierry Neuville. El belga, todavía persiguiendo los reglajes adecuados para su Hyundai, está sufriendo lo indecible para imprimir un rimo competitivo.
Pierre-Louis Loubet y Gus Greensmith también tuvieron algún que otro susto con las agresivas compresiones de la península escandinava. El galo es octavo, endosando menos de dos segundos a su vecino en las carpas de la formación británica. Jari Huttunen, debutante en la categoría reina, pierde su lugar en el top diez por culpa de problemas con la presión del combustible. El local se dejó más de cinco minutos con la avería.