Sébastien Ogier y Vincent Landais han logrado una victoria (casi) pluscuamperfecta en el Rally del Paraguay, llevándose la 1º edición que este país alberga el Mundial de Rallies. Para ellos, supone un triunfo que les acerca muchísimo de cara al título de pilotos y copilotos, mientras que para Toyota supone la victoria 102 en el WRC, igualando a Citroën como la marca más laureada en la historia del WRC.
Si ya este rally había tenido sobresaltos, el domingo no sería menos: antes siquiera de empezar, en el enlace hacia el tramo de Bella Vista, Thierry Neuville se veía obligado a parar con problemas técnicos en su Hyundai, pero pronto estaba de nuevo en marcha rumbo a este tramo de 21,25 km de longitud. Ogier abría fuego con el scratch aquí para sacudirse a Adrien Fourmaux, quien tuvo una salida de pista y caló su Hyundai, perdiendo casi 20 segundos. Elfyn Evans también tuvo una pequeña salida de pista, lo que le costó el tercer puesto a favor de Ott Tänak.
Los dos Ford Puma Rally1 de M-Sport tuvieron también errores en cruces en este tramo (al igual que Takamoto Katsuta) y Grégoire Munster, abriendo pista en condiciones complicadas, trompeaba a los 8,4 km del tramo de Misión Jesuítica Trinidad que después sería el Wolf Power Stage. Neuville se llevaba el mejor tiempo por delante de Fourmaux, quien recortaba un par de segundos a Ogier.
En la segunda pasada por Bella Vista, la zona del paso de agua hizo que tanto Tänak como Fourmaux perdiesen potencia en su motor durante unos segundos - después Tänak pinchaba su trasera derecha, perdiendo poco tiempo pero el suficiente para caer por detrás de Evans y Neuville en la general (y perdiendo aún menos tiempo en rajar de las Hankook, nunca mejor dicho). Además Evans veía como Fourmaux se le ponía a tiro para una Wolf Power Stage sobre terreno mojado.
En la Wolf Power Stage, algunos sobrevivían, tratando de asegurar resultado, mientras que otros como Rovanperä o Neuville iban a por todas - a Tänak se le fue un dámper a pocos metros del final, cediendo tiempo con el finés de Toyota mientras que Neuville fue como un misil en la sección de asfalto para superar a Rovanperä por una décima.
El siguiente era Evans y se encontró con la lluvia, perdiendo tiempo en los parciales con Neuville, pero logró remontar al final y mantuvo el podio por un segundo sobre el belga. Para Fourmaux, la lluvia fue letal y le hizo caer por detrás de Evans y Neuville por 1,3 segundos. Ogier perdería casi 20 segundos, pero gracias a su colchón sería vencedor por 26,2 segundos sobre Evans y 27,2 con respecto a Neuville. Neuville se llevaba los 5 puntos de la Wolf Power Stage, Rovanperä 4, Tänak 3, Evans 2 y Katsuta 1, mientras que en el Super Sunday Neuville se llevaba 5 puntos, Rovanperá 4, Evans 3, Tänak 2 y Ogier 1.