Su nombre entra en la historia del Campeonato del Mundo. Por muchas temporadas que transcurran nadie conseguirá borrar a Maxine Wahome del palmarés de WRC3. La keniata inició hace apenas un año su trayectoria deportiva. Lo hizo en el Safari Rally a los mandos de un Subaru Impreza STI de producción. Hoy, en la prueba más reputada de su país, ha logrado la primera victoria de una mujer en la división de bronce.
El miércoles en el Shakedown se subió por primera vez a un Ford Fiesta Rally3, vehículo con el que intentaría luchar por los puestos de honor durante el fin de semana. Cinco días después de estrenarlo, y para su propia sorpresa, figura en lo más alto del podio del evento mundialista. Wahome ejecutó brillantemente su plan maestro. Mientras sus compatriotas acumulaban sanciones e incidentes, ella avanzaba con la cautela justa.
Esta edición del extenuante Safari Rally de Kenia también perdurará eternamente en la memoria de la famila Wahome, ya que al segundo escalón del cuadro de honor se encaramó Jeremy, el hermano de la ganadora. El abandono de Hamza Anwar permite a los cosanguíneos celebrar un doblete que no aparecía ni en sus sueños más optimistas. McRae Kimathi finalizó tercero y muy lastrado por una concatenación de errores.