La renombrada división de bronce del Mundial de Rallyes, convertida en un certamen monomarca hasta que otros fabricantes apuesten por seguir los pasos de M-Sport Poland y construir un vehículo en de la categoría Rally3, inicia su nueva andadura en el 90º Rallye de Monte-Carlo. En las calles del Principado se han dado cita cuatro unidades del Ford Fiesta, encabezadas por la del vigente campeón de WRC Junior, Sami Pajari.
El finlandés, en su debut con un sistema de tracción a las cuatro ruedas, concluyó las especiales nocturnas de la ronda monegasca en segunda posición. La inexperiencia jugó en su contra en la primera cronometrada, en la que Jan Cerný estableció un registro absolutamente inalcanzable para sus rivales. El descenso del Škoda Fabia Rally2 Evo con el que competía en su nacional no ha mermado las condiciones del checo.
Con los 17.1" que endosó a su más inmediato perseguidor en el TC-1, Cerný no se excedió en el Col de Turini, ampliando su liderato a pesar de aminorar ligeramente el ritmo. Así las cosas, retorna a las carpas de su equipo con una ventaja de 21.2" sobre Pajari. El italiano Enrico Brazzoli es tercero en tierra de nadie. Al húngaro Zoltán László, cuarto, el bautismo en el asfalto francés le ha resultado extremadamente complejo.