La primera jornada real del Rally de Japón ha comenzado con una cascada de incidencias. Los participantes de la categoría reina completaron dos de las tres especiales previstas, pero los demás no alcanzaron la pancarta de meta en ninguna. Un incendio calcinó el Hyundai i20 N Rally1 de Dani Sordo, una salida de carretera truncó el sueño mundialista de Kajetan Kajetanowicz, otro accidente causó la baja de Craig Breen...
Las llamas que devoraron el vehículo del piloto español condicionaron el desarrollo de una sección muy acortada en kilometraje. El retraso forzado por las labores de extinción obligó a los organizadores a cancelar el segundo tramo del día. El tercero sí lo finalizaron todos los involucrados en la máxima división. Arribados al ecuador de la etapa, el liderato de la exigente cita asiática lo comparten Elfyn Evans y Thierry Neuville.
La mañana empezó con un scratch de Kalle Rovanperä en los 23.29 kilómetros de 'Isegami's Tunnel', la cronometrada más larga del fin de semana. El finlandés arrebató con él la batuta de mando a Sébastien Ogier, víctima de un pinchazo que le hizo perder cualquier opción. Sin embargo, la estancia del campeón del mundo en la cima de la tabla fue efímera. El subviraje de su Toyota GR Yaris motivó su descenso al tercer puesto.
La extraordinaria actuación de Evans en 'Shitara Town R' también tuvo culpa en los cambios de la clasificación. El galés encontró la velocidad que llevaba buscando desde Monte-Carlo, estableciendo un registro lo suficientemente rápido para superar a su compañero y empatar a la décima con Neuville. El top tres regresa a las inmediaciones del Toyota Stadium separado por siete décimas, diferencia insignificante a estas alturas.
Cuarto marcha un Ott Tänak mermado por problemas en la transmisión de su Hyundai i20 N Rally1. El estonio, en su prueba de despedida de la formación surcoreana, precede a un Takamoto Katsuta decepcionado con su conducción. El ídolo local rueda a quince segundos de la cabeza. Justo a su espalda figura Gus Greensmith, el único superviviente de la armada M-Sport Ford. Breen, de nuevo, optó por terminar antes de tiempo.