Déjà vu. En verano de 2019 los periodistas que cubrimos íntegramente la temporada del Mundial de Rallyes tuvimos conocimiento de las negociaciones llevadas a cabo entre Dani Sordo y su entorno con el entonces director del equipo Toyota, Tommi Mäkinen. Pese a que la oferta de los japoneses era generosa, el de Puente San Miguel decidió seguir en Hyundai Motorsport, equipo para el que compite desde 2014 y en el que ha alcanzado su mejor nivel en el Mundial de Rallyes.
Dos años después parece que la historia se vuelve a repetir, aunque ahora el mandamás de la formación japonesa es alguien con el que Sordo ha coexistido en su periplo en la categoría reina del WRC, Jari-Matti Latvala. Son ya diferentes medios, tantos españoles como británicos, que se hacen eco de los rumores que sitúan al cántabro negociando con Toyota por un hipotético fichaje para el próximo año. Algo nada descabellado, teniendo en cuenta que Latvala debe cerrar la renovación de Elfyn Evans y buscarle un sustituto de garantías a Sébastien Ogier, que, en teoría, se retirará a finales de año -aunque seguramente esté dispuesto a correr varios rallyes en 2022-.
De este modo, si el francés opta por disponer de un programa parcial, las opciones de Sordo se incrementan, ya que el español no parece muy por la labor de firmar un contrato que le “obligue” a disputar todas las pruebas del Campeonato del Mundo.
Todas las negociaciones están paradas a la espera que finalice el Rallye de Italia-Cerdeña, donde Sordo y Borja Rozada buscarán la victoria -sería la tercera consecutiva del de Hyundai en esta cita-, algo que podría desencadenar su renovación por la firma coreana, donde su jefe, Andrea Adamo, le tiene en alta estimo por su sensacional aportación en los títulos de marcas cosechados recientemente.
Lappi, otra alternativa para Toyota
Si el equipo dirigido por Jari-Matti Latvala busca un perfil de piloto más joven y algo más versátil que el cántabro, dispuesto a correr todas las pruebas de la temporada, el hombre que ha empezado a sonar con fuerza ha sido el de Esapekka Lappi.
Sin volante oficial tras 2020, el finlandés está intentando regresar a la marca con la que dio el salto a la élite y con la que ganó el Rallye de Finlandia de 2017. Apostar por Lappi, que sigue en forma y que ha ganado las dos carreras que ha disputado este año en el WRC2, sería completamente opuesto a la carta Sordo, un piloto más experimentado que te garantiza muchos puntos, pero que, a cambio, únicamente corre los rallyes en los que sabe que es capaz de sacar la quintaesencia de la máquina que tiene entre manos.
Veremos como acaba desarrollándose todo, pero hay otros factores a tener en cuenta en este mercado de pilotos, como por ejemplo Andreas Mikkelsen -que apunta a M-Sport Ford- o el jovencísimo Oliver Solberg, al que el futuro le aguarda, sí o sí, uno de los Hyundai i20 N Rally1 que se estrenarán el próximo año.