Hasta ahora, Citroën Racing ha confirmado que alineará dos coches para la temporada 2019 del Campeonato Mundial de Rallyes, de manera similar a como ha hecho este año. No obstante, no descarta que haya tres coches en al menos algunas pruebas, con muchos aspectos aún por cerrarse para la escudería liderada por Pierre Budar.
En el aspecto económico, la mayor cuestión será la continuidad de Abu Dabi (algo que implica de manera directa a Khalid Al-Qassimi) como principal patrocinador de la marca de los dos chevrones, habiéndoles acompañado durante los últimos años. La llegada de Sébastien Ogier implica también que Red Bull estará como patrocinador del equipo y hasta ahora Red Bull y Abu Dabi nunca han apoyado al mismo equipo a la vez.
Puesto que la presencia de Ogier y Esapekka Lappi para 2019 y 2020 es lo único que está confirmado por parte de Citroën, también está en el aire (es decir, en negociaciones) lo que pueda ocurrir con Craig Breen y Mads Ostberg. Breen es un piloto que ha crecido como piloto dentro del Grupo PSA mientras que Ostberg ha recalado este año en el equipo de nuevo tras la salida por la puerta trasera de Kris Meeke – Ostberg ya fue parte del equipo oficial en 2014 y 2015.
Según aseguró el propio Budar a este medio, antes de poder sentarse con alguno de estos pilotos es necesario asegurar que pueda haber un tercer coche. Los recursos se centrarán en tener dos C3 WRC que puedan ser tan competitivos como para devolver a Citroën a una posición en la que pueda pelear tanto por el campeonato de pilotos como de marcas tras la sequía de resultados de los últimos años.
El otro hombre relacionado con un posible tercer coche no es otro que Sébastien Loeb, quien a sus 44 años logró ganar el RallyRACC el pasado domingo pese a todos los años en los que ha estado alejado del WRC (compitiendo en raids, rallycross y turismos), siendo la victoria número 79 de su ilustre carrera. Loeb ya ha asegurado que no piensa hacer una temporada completa, pero no descarta volver a correr pruebas sueltas como ha hecho este año (además de la prueba española, disputó en la primera mitad de la temporada los rallyes de México y Córcega).
La presencia del tercer coche (algo que parece depender de cuestiones económicas, de ahí la importancia de la decisión final de Abu Dabi) es imprescindible para poder resolver la cuestión sobre el futuro de los tres pilotos. Si Citroën quiere pelear por los dos campeonatos como también declaró Budar, tener tres coches en cada rallye sería la opción a seguir al igual que sus rivales en el WRC.