El piloto revelación del 11º Rallye Tierras Altas de Lorca defendía los colores de la filial española de una marca francesa. Nunca antes había conducido un vehículo de tracción total en una prueba sobre tierra. En las pistas murcianas descubrió esa sensación, y no precisamente en un firme tradicional. Las constantes precipitaciones transformaron el terreno, convirtiéndolo en un deslizante barrizal muy difícil de conquistar.
Alejandro Cachón brilló en su debut con el Citroën C3 Rally2. Imprimiendo un ritmo competitivo, el asturiano demostró un exquisito grado de madurez. El mono de piloto oficial no escondió su talento. A pesar del imponente plantel que se presentó en la región mediterránea, apenas 1.6" le separaron del podio, circunstancia que le sorprendió: "Cuando llegamos no nos esperábamos estar luchando por los puestos de cabeza".
Pocos kilómetros bastaron al de Sports&You para igualar la velocidad de rivales infinitamente más experimentados con maquinaria Rally2. Encajó con el artefacto galo a la perfección: "El Citroën la verdad que es un coche top, va muy bien. Nos hemos compenetrado bien, hemos hecho bastantes kilómetros de test, aunque es verdad que en barro no lo había probado. Me sorprendió su respuesta en estas condiciones".