Miguel Fuster ha regresado a lo grande a la competición en el Rallye Ciutat de Xixona, pilotando por primera vez un Ford Fiesta R5 MkII con el que ha brillado de nuevo con luz propia delante de su afición. A pesar de haber estado casi cuatro años sin subirse a un vehículo de estas características, el hexacampeón de España de Rallyes de Asfalto ha demostrado una vez más el talento innato y las grandes cualidades que atesora al volante.
El piloto de Benidorm ha experimentado una adaptación instantánea al modelo de última generación, patrocinado por Ford Movilsa e IMED Hospitales, con el que ha debutado en la cuarta cita del campeonato valenciano: un Ford Fiesta R5 MkII como los que defienden los honores de la marca del óvalo en la categoría de plata del WRC (World Rally Championship).
Miguel Fuster y su copiloto, Nacho Aviñó, han empezado cuajando una actuación espectacular en las abrasivas carreteras por las que se disputa el Rallye Ciutat de Xixona, donde se han estrenado este fin de semana a lomos de la versión más evolucionada del mismo vehículo con el que conquistaron juntos el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto del 2018.
El bravo piloto benidormense ha asumido desde el principio el liderato de la cita alicantina, marcando el ritmo a seguir a los mandos del Ford Fiesta R5 MkII alquilado al equipo Oscarsan Sport, que capitanea Óscar Palacio, pluricampeón asturiano y vencedor en 2021 de la primera edición de la CERA - Recalvi (Copa de España de Rallyes de Asfalto).
Miguel Fuster ha exhibido un ritmo de carrera cada vez más espectacular, calzando los compuestos de última generación desarrollados por Pirelli, la marca de neumáticos con la que el hexacampeón de España sentenció hace cinco años su sexto título nacional.
El piloto alicantino se ha mostrado cada vez más competitivo al volante de su nueva montura, hasta que, lamentablemente, una avería en la dirección, que el equipo Oscarsan Sport ha tratado de solventar sin éxito, le ha impedido redondear la victoria del Rallye Ciutat de Xixona.
Una cita que, en cualquier caso, le ha servido a Miguel Fuster para recuperar sensaciones en su regreso a la competición, y, al mismo tiempo, para demostrar que sigue rindiendo al cien por cien en esta nueva fase de su carrera deportiva, pleno de forma y con la máxima motivación.
Miguel Fuster: "Está claro que me hubiese encantado poder rematar la victoria en mi vuelta a los rallyes... Pero las carreras a veces son así y siempre hay que quedarse con lo positivo. En este sentido, estoy muy satisfecho por las sensaciones que he tenido y el ritmo que he vuelto a coger después de cuatro años sin competir. Me encuentro feliz de haber vuelto y con ganas de más".