Ocho de trece. Albert ya ha completado ocho de las trece etapas necesarias para finalizar este Rally Dakar. Pese a las caras de agotamiento presentes en todo el campamento, se dice que ahora llega lo duro. Arena, calor, y WP complicados de encontrar. Toca volver a aprender, toca averiguar cómo se comparta el camión en las dunas, donde un error te supone un vuelco y grandes opciones de finalizar ahí tu carrera.
La primera toma de contacto con las dunas finalizó favorablemente. Sin errores y con ritmo constante, Albert Llovera y su Trata finalizaron la etapa en la vigesimocuarta posición a 1:36’50’’ del camión de Gerard de Rooy. Albert se encuentra cómodo en esta mitad de tabla, codeándose con gente mucho más experimentada que él en el mundo de los camiones. Ahora el enemigo es el calor, calor extremo sumado a un cuerpo ya castigado. Las próximas etapas, serán duras.
“Los mecánicos le dieron un buen repaso al Tatra, mientras que por mi parte pasé mi ITV particular, el cuerpo empieza a notar el esfuerzo. Los brazos, sobre todo el izquierdo, acaba las etapas un poco hinchado. También tengo un golpe en las piernas, es de suponer que en algún bote he tocado con los mandos ... no me doy cuenta hasta que puedo cambiarme de ropa. En fin de momento hemos recuperado fuerzas veremos si serán suficientes para ir sorteando lo que nos falta.”
“Era de esperar que sería una jornada larga, casi 800 km, pero con dificultades que hasta ahora no habían aparecido. Sobre todo en el segundo sector, las primeros tramos de arena y zonas de navegación en las que se auguraban largos paseos para encontrar algunos waypoints. Ha sido duro, también por el calor, pero hemos seguido la misma línea de regularidad que en etapas anteriores y hemos llegado a Belen con tiempo para preparar la etapa de mañana con relativa tranquilidad. Estoy cansado pero muy contento de cómo está saliendo la carrera.”