Surhayén Pernía y Rogelio Peñate (Hyundai i20 R5) han terminado quintos la edición número 55 del Rally Princesa de Asturias, séptimo capítulo de la temporada del Campeonato de España de Rallies de Asfalto (CERA). Aunque rondaron los puestos de honor, una serie de inconvenientes acabaron alejándolos de las posiciones de honor antes de los tramos finales.
Desde la primera sección del viernes, el piloto cántabro supo que el rally asturiano se le ponía cuesta arriba. “Es un rally largo y por eso optamos por montar neumáticos con un compuesto duro en el primer bucle. No íbamos nada a gusto y aunque luego corregimos el error y empleamos unos más blandos, no teníamos la confianza para poder atacar de verdad”, explica el de Hyundai, que terminó la primera jornada de cuatro tramos a 19,3’’ del podio después de averiarse el alternador.
Con la determinación de revertir la situación en los ocho tramos de la segunda etapa, la del sábado, Pernía y Peñate decidieron seguir haciendo modificaciones en la configuración del Hyundai i20 R5, pero esos retoques no tuvieron el efecto deseado. Así, después de los cuatro tramos matinales, el coche llegaba con los neumáticos absolutamente destrozados. “Llegamos a la asistencia en lonas”, subraya Pernía, que en ese momento ya había perdido el tren del podio y peleaba con un equipo local, el de Óscar Palacio. “El coche subviraba una barbaridad y eso acabó destrozando las ruedas”.
En esa última visita a las asistencias de Vallejo Racing se hicieron los últimos ajustes en el i20 R5 que resultaron claves para que, por fin, Pernía y Peñate rodaran cómodos sobre el siempre peculiar asfalto astur. Sin embargo, ya no tenían ningún juego de neumáticos nuevos para poder recuperar la cuarta plaza.
“Al final, han sido una serie de pequeñas cosas las que han hecho imposible que lo diéramos todo en los tramos. No teníamos ritmo para pelear con José Antonio Suárez e Iván Ares por la victoria, pero sí creo que teníamos la posibilidad de estar con Dani Solà jugándonos el podio”. Quintos a la postre, también perdieron un tiempo valioso al detenerse en el undécimo tramo en la zona en la que se salían Javier Pardo y Adrián Pérez. Por si fuera poco, Pernía y Peñate hicieron toda la última sección sin poder parar el coche al averiarse el motor de arranque.
“Al final dimos con un ‘set-up’ que creo que nos servirá como base para Llanes y Santander. Espero que a partir de ahora lleguen los resultados porque todos en el equipo estamos trabajando muy duro. Lo más positivo es que seguimos sumando puntos. Al fin y al cabo, no tenía sentido arriesgar cuando no teníamos una puesta a punto que nos diera confianza”, valoraba al término del Rally Princesa de Asturias el piloto Hyundai.
Su compañero Rogelio Peñate también hacía balance de esta séptima prueba del CERA. “Desde que empezó la carrera buscamos nuestro sitio y aunque después de la primera etapa parecía que teníamos opciones de alcanzar el cajón, nos equivocamos con la puesta a punto en la primera sección de hoy y llevamos a los dos últimos tramo sin ruedas. Han sido una serie de inconvenientes los que nos han impedido rendir como habríamos querido”.
La siguiente cita del CERA 2018, el Rally Villa de Llanes se disputará los días 28 y 29 de septiembre.