Arrancó el Campeonato de Finlandia de Rallyes en el Círculo Polar Ártico en unas especiales que el pasado año acudieron al rescate de la prueba invernal del Mundial de Rallyes. En la región de Laponia se celebró el Arctic Rally, uno de los eventos en los que la ausencia de nieve no supone problema alguno. Si acaso, la abundancia. Los equipos disputaron dos etapas, completando los supervivientes 223.70 kilómetros.
El primer día concluyó con Emil Lindholm y su Škoda Fabia Rally2 Evo instalados en la cima de la tabla con una renta de 10.8" sobre Teemu Asunmaa, armado con otro vehículo de la firma checa. El dúo de cabeza imprimía un ritmo inalcanzable para el grupo perseguidor, comandado por Mikko Heikkilä (Škoda Fabia Rally2 Evo) a 41.6" de su predecesor. Egon Kaur se mantenía en la pugna por el bronce con un Volkswagen Polo GTI R5.
Lindholm, que había sufrido un trompo en el último tramo del viernes, tomó el sábado un desayuno enérgico con el que endosó a su rival más próximo 17.1" en la especial que abría la jornada. Con una cómoda ventaja, se dedicó a gestionar... hasta que atropellaba a un ciervo y cedía la batuta de mando a Asunmaa por 0.1" a falta de una cronometrada. El desenlace fue favorable al mundialista Lindholm, que no sucumbió a la presión.