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La categoría ‘Extreme’, permitida y establecida en los campeonatos de rallyes de países como Nueva Zelanda, hace honor a su nombre con vehículos de más de cuatrocientos caballos de potencia. Es el caso de este Mazda 2 preparado por el equipo Andrew Hawkeswood Motorsport.
Debajo del capó se encuentra un propulsor Renault V6 3.5 con 450 caballos de potencia, más propio de circuitos que de tramos de rallyes. Su espectacular aspecto exterior da una ligera idea de cómo pueden llegar a ser los vehículos del Campeonato Mundial de Rallyes de 2017 en adelante.
Hawkeswood lleva pilotando el Mazda 2 desde finales de 2013, después de haber conducido un Audi Quattro y un Mitsubishi Lancer Evolution VII. El piloto norteamericano Ken Block ha sido otro de los participantes de esta espectacular categoría, corriendo con el Ford Fiesta HFHV con más de 350 caballos en pruebas como el Rallye Whangarei – otro vehículo particular es el Kelsey MC2, un Peugeot 207 con grandes modificaciones a nivel mecánico.