Con su ‘mejorable’ actuación en el retorno del Mundial de Rallyes 2020 en Estonia, M-Sport Ford ha advertido que debe elevar su rendimiento. Y es que a pesar de que la formación de Cumbria lucha en desigualdad de condiciones y presupuesto ante Hyundai y Toyota, similar a la lucha entre David y Goliat, no se conforma con las prestaciones que han mostrado en dicha cita báltica.
Es más, tienen la esperanza de que la habitual dureza del Rallye de Turquía, quinta ronda del certamen, que se celebra este fin de semana (18-20 septiembre), les ofrezca una oportunidad para brillar. Precisamente, ese completo cambio de escenario podría jugar a favor de una fuerza que se crece en la adversidad.
Aprovechando esas desafiantes circunstancias en las que suelen mostrar sus virtudes, la estructura de Marcus Wilson sueña con cuajar un buen resultado en el evento en Marmaris. Con ese desafiante objetivo, repetirá la alineación anterior con los finlandeses Esapekka Lappi, Teemu Suninen, y el británico Gus Greensmith a bordo de los tres Ford Fiesta WRC.
Precisamente, los antecedentes de Suninen dejan la puerta abierta a la esperanza ante el compromiso otomano, donde siempre ha exhibido un buen rendimiento:
“En 2019 completamos un rallye muy bueno en Turquía. En ese fin de semana aprendí mucho, ya que logramos el equilibrio perfecto entre un buen ritmo y pilotar sin errores a pesar de los complicados tramos de la prueba. El objetivo será partir de ese concepto para repetir esa actuación este fin de semana. Si tenemos un poco de suerte podremos firmar un resultado destacado en el Rally de Turquía”., ha expresado Teemu.
Después de terminar cuarto en las dos ediciones anteriores, Teemu Suninen se postula como posible candidato al podio, especialmente si la competición se desarrolla con la exigencia que la caracteriza, lo que suele generar algunos abandonos de los favoritos.
“El Rallye de Turquía nunca es una prueba fácil, puesto que requiere una gran resistencia física, mental y también del vehículo. Pienso que si logramos tener un buen rallye y completar un ejercicio de pilotaje inteligente, mostrando el ritmo adecuado en cada uno de los tramos, somos capaces de lograr un resultado sólido en Turquía”.
Mientras, en el plantel de M-Sport Esapekka Lappi mantiene los mejores resultados en Marmaris, aunque conquistados con Citroën. El finlandés terminó segundo en la ronda otomana en 2019:
“Tenemos un buen recuerdo de esta prueba. Acabamos segundos en el Rallye de Turquía el año pasado y sería genial conseguir otro buen resultado este año. El Ford Fiesta WRC ha demostrado buenas prestaciones en este rallye en el pasado, por lo que estoy convencido de que vamos a conseguir lo necesario para adaptarnos a sus tramos”.
En relación al territorio al que se enfrentará su Ford, considera que Turquía se adaptará mejor a las características de su montura que Estonia. Además señala que la regularidad y la buena disposición mental para eludir los riesgos que siempre plantea esta carrera, serán la clave del éxito:
“Turquía es una prueba compleja en la que necesitas usar tu cabeza para poder ser rápido. Es fundamental detectar cuándo es el momento adecuado para empujar y cuándo para levantar el pie del pedal. La clave es encontrar el equilibrio entre velocidad y resistencia, pero si somos capaces de hacerlo bien no deberíamos estar muy alejados de los más fuertes”.
La apuesta de Cumbira se completa con Gus Greensmith, vencedor del Rallye de Turquía 2019 en la categoría WRC2 Pro:
“Tengo muchas ganas de competir en el Rallye de Turquía. Espero que no sea tan ‘movido’ como el año pasado. Posiblemente fue la victoria más dramática de mi carrera, pero demostró lo fuerte que puede ser el Ford Fiesta en cualquier categoría. La fortaleza de nuestro chasis debería ser una gran ventaja para nosotros en el Rally de Turquía, porque sus etapas son muy exigentes. Son los tramos más duros del año y los de mayor exigencia física”.