Después de que sus dos compañeros en el Toyota Gazoo Racing WRT, el defensor de la corona del WRC, Sébastien Ogier, y el subcampeón de 2020, Elfyn Evans, se subieran a sus respectivos Yaris WRC, ha llegado el turno del tercer integrante de la formación japonesa.
Así, este lunes el joven Kalle Rovanperä y su copiloto Jonne Halttunen se han puesto al volante de su máquina oriental en los Alpes franceses. Al igual que en el caso de sus dos vecinos de box, el finlandés ha rodado con la vista y mente puestas en el Rallye de Montecarlo.
Cabe recordar que, a pesar de la amenaza de cancelación por la pandemia del coronavirus, el Mundial de la especialidad de 2021 echará a andar del 21 al 24 de enero. Eso sí, con un itinerario sensiblemente recortado y modificado y con un horario nuevamente adelantado para evitar el toque de queda impuesto por las autoridades francesas ante el galopante aumento de contagios en el país vecino.
Sea como fuere, el hijo de Harry Rovanperä afrontará su segunda campaña en la categoría reina del certamen. Después de un destacado año de debut donde firmó su primer podio en su segunda cita en el WRC, dejando probadas muestras de su talento, quiere continuar creciendo para consolidarse en el deporte.
E indudablemente, ese objetivo pasa por encontrar el mayor ‘feeling’ con su máquina, acelerando su proceso de adaptación a la misma. Solo de ese modo podrá extraer el máximo rendimiento de ella y de sí mismo durante el certamen.
Pues bien, el primer paso de cara al nuevo curso ha comenzado con una intensa jornada de entrenamientos. Y como no podía ser de otro modo, se ha desarrollado bajo unas desafiantes condiciones que replican las que se encontrará en la cita alpina: hielo y nieve con un asfalto delicado y deslizante.
Terreno poco complicado para un piloto nórdico a quien le salieron los dientes conduciendo en ese tipo de escenario. Así lo demuestra su tercer puesto en el Rallye de Suecia 2020 tras una intensa batalla en la que derrotó por el cajón al mismísimo Ogier, quien pasados unos meses sumaría su séptima corona.