Twitter (@TheDDuran)
Instagram (@dduranissimo)
Ott Tänak y Martin Jarveoja han terminado al frente la primera etapa del Rallye de Portugal, una valiosa posición ya que les garantiza una posición de salida muy positiva de cara a la jornada del sábado. Detrás tienen a sus compañeros de equipo en Toyota Gazoo Racing Jari-Matti Latvala y Kris Meeke, si bien el británico tiene resoplándole en el cogote tanto a Thierry Neuville como a Sébastien Ogier.
La tarde empezaba con los Toyota al frente seguidos de cerca por los Ford de M-Sport, estando relegados a un segundo plano los Citroën y los Hyundai – los coches de Sébastien Loeb y Dani Sordo estaban reparados y listos para continuar la prueba tras acabar el bucle anterior. Sordo se llevó el scratch y Latvala consiguió marcar el segundo mejor tiempo en conjunto con Suninen, quien se acercaba a un segundo de la tercera posición que ostentaba Meeke a la vez que Latvala recortaba algo de tiempo a Tänak, líder de la prueba.
Suninen se encargaba de pelear contra los Toyota en solitario después de que Evans perdiera cuatro minutos cuando su Ford Fiesta WRC se quedó parado con un problema eléctrico que el propio piloto pudo reparar desde el coche. El galés continuó la marcha, levantando una estela de polvo que afectó a Esapekka Lappi, que venía justo detrás suya y perdió más de 50 segundos. Ogier y Neuville peleaban por posición mientras que Sordo se dejaba más de un minuto con un pinchazo.
Neuville terminó el tramo de Arganil marcando un gran tiempo con el que adelantaba a Ogier en la general, escalando al cuarto puesto (y Ogier de nuevo al quinto) después de que Suninen tuviera problemas de frenos y se dejara casi un minuto. De hecho, la pelea por el tercer puesto entre ambos y Meeke estaba contenida en 4,3 segundos. Tänak salía de Arganil con más colchón después de que Latvala cometiera un error y calase en una horquilla.
El último tramo del día, una pasada por el tramo súper especial de Lousada, comenzó con Sordo y Loeb abriendo el telón, si bien Sordo estuvo algo rezagado y la salida le pilló con su puerta abierta, dejándose unos segundos que no cambian su situación de cara a la segunda etapa. Neuville marcó el scratch por delante de Ogier y Tänak, un anticipo de la lucha que se vivirá en la larga jornada que queda por delante.
Tänak acabó el día con 17,3 segundos de ventaja sobre Latvala y 22,8 sobre Meeke, teniendo el británico en su sombra tanto a Neuville como a Ogier. Suninen, Gus Greensmith, Lappi, el líder en WRC2 Ole-Christian Veiby y el líder de WRC2 Pro Jan Kopecky (a los mandos del nuevo Skoda Fabia R5 Evo) completaron las diez primeras posiciones.