Twitter (@TheDDuran)
Nasser Al-Attiyah ha demostrado las ganas con las que desea mantener su corona de campeón del Dakar además de su honor de campeón mundial de todoterrenos. El catarí se mantiene en cuarta posición después de cinco etapas, donde se ha mostrado el poderío de los nuevos Peugeot 2008 DKR 16.
La posición de Al-Attiyah en la clasificación general refleja el mejor esfuerzo efectuado por los hombres de X-Raid, pues el siguiente es el ex piloto mundialista y debutante en el Dakar Mikko Hirvonen, situado en séptima posición a nueve minutos del catarí. Tanto Nani Roma como Orlando Terranova han tenido varios problemas, situándose ambos fuera de las diez primeras posiciones tras la segunda etapa que se le atragantó a los dos.
No obstante, el mayor problema de los Mini es la falta de ritmo frente a los 2008 DKR 16 de Sébastien Loeb, Stéphane Peterhansel y Carlos Sainz, destacados líderes de la prueba y que amenazan con mostrar un dominio similar tanto en el resto del Dakar como en el Campeonato Mundial de Todoterrenos. Los tres pilotos oficiales han declarado al final de varias jornadas que pese a sus intentos en cada WP, los Peugeot consiguen aventajarlos en segundos y minutos conformen avanzan a través del itinerario.
“Nunca en mi vida he ido tan rápido como he ido ayer y hoy. Pero no tenemos oportunidad contra los Peugeot en velocidad: es complicado atraparles. Así que enhorabuena por el gran trabajo que han hecho. Hacemos lo que podemos y no nos rendimos. Necesito concentrarme en mi trabajo”, declaró Al-Attiyah.
Hasta 2015, los Mini All4Racing del equipo de Sven Quandt eran los vehículos a batir en la prueba dakariana, siendo superiores al resto de maquinarias incluyendo los 2008 DKR con los que Peugeot se presentó en 2015. No obstante, la versión 2016, más potente, ligera (y de momento también fiable) ha aprovechado mejor la normativa vigente de la prueba, liderando la prueba con tres buggies de tracción delantera con treinta caballos más y setecientos kilogramos menos.