M-Sport ha realizado unos test sobre asfalto en el circuito belga Ford Lommel Proving Ground, propiedad de la marca del óvalo, el pasado viernes 28 de diciembre. El equipo británico ha llevado las últimas evoluciones aerodinámicas del Ford Fiesta WRC de cara a la temporada 2019 del Campeonato Mundial de Rallyes.
Estas evoluciones aerodinámicas, notables sobre todo por el gran tamaño del parachoques trasero para maximizar la carga, fue la aportación más visible de Ford Performance durante la temporada 2018. Pese a que se trataba de apoyo oficial después de años funcionando 100% como equipo privado, esto no fue suficiente para que Sébastien Ogier decidiera quedarse, optando en su lugar por regresar a Citroën Racing para este 2019.
Estos test serán los últimos que se vean en este año antes de los test previos al Rallye de Monte-Carlo, que abrirá un año más el calendario del WRC. Unos días antes todos los equipos volverán a probar para la prueba alpina después de que ya lo hayan hecho a lo largo de todo este mes de diciembre, tanto M-Sport como Citroën, Hyundai Motorsport y Toyota Gazoo Racing.