Por vez primera en su trayectoria en el Mundial, Sébastien Loeb participó en una prueba sin Daniel Elena a su lado. El alsaciano recurrió a Isabelle Galmiche, una profesora de matemáticas que formaba parte de su equipo, para suplirle. Ella no avanzó demasiado a sus alumnos. "Fui muy discreta en la escuela y no dije mucho sobre el evento a los estudiantes, así que creo que estarán bastante sorprendidos cuando me vean de nuevo".
La oferta de copilotaje le llegó del propio nonacampeón, que la situó en la primera posicición de la lista de nuevos navegantes: "Después de que Daniel decidiese dejar los rallyes, Séb me llamó para preguntarme si haría el Monte-Carlo con él. Inmediatamente le respondí que sí. Hice muchísimas sesiones de pruebas con él cuando estaba en Citroën y Hyundai y Daniel no podía acudir a ellas, pero este era nuestro primer rally juntos"
Galmiche había concurrido previamente en varias rondas del campeonato, acompañando a Quentin Gilbert en WRC3 y a Jean-Michel Raoux en el extinto WRC Trophy. Su estreno en un equipo oficial se saldó con una victoria que materializa uno de sus deseos: "Es un sueño hecho realidad. Ya lo era el hecho de tomar la partida en el Monte-Carlo con Séb en un coche tan bueno, pero ganar... no hay nada mejor que esto. ¡Qué historia!"