Pilotando un Toyota GR Yaris Rally1 HYBRID, el finlandés superó a su compañero de equipo en Toyota GAZOO Racing, Elfyn Evans, por 23,4 segundos, conquistando carreteras cada vez más difíciles y húmedas a través de la región chilena de Bio Bío.
Rovanperä comenzó la undécima prueba de la temporada con cautela, admitiendo que la tierra chilena no se adaptaba a su estilo de pilotaje. Sin embargo, a medida que avanzaba el rallye, fue encontrando su ritmo. El punto de inflexión llegó el sábado por la tarde, cuando superó a Evans con una visibilidad casi nula, sorteando la espesa niebla en los tramos de montaña para hacerse con un liderato de 15,1 segundos de cara a la última jornada.
El bicampeón del WRC se mantuvo imperturbable en condiciones igualmente difíciles hoy, superando a Evans en todos los tramos menos uno de los cuatro para asegurarse la 15ª victoria de su carrera en el WRC.
Ott Tänak, de Hyundai Motorsport, completó el podio, por detrás de Evans por 20,5 segundos en su i20 N Rally1 HYBRID. A pesar del podio del estonio, Hyundai perdió terreno en el campeonato de constructores con Toyota reduciendo la diferencia a sólo 17 puntos, cortesía de las magistrales actuaciones de Rovanperä y Evans y la crucial cosecha de puntos del Super Domingo de Sébastien Ogier.
«Me siento muy bien», sonrió Rovanperä. «Muchas gracias al equipo, el coche y todo ha funcionado a la perfección. La verdad es que la victoria me sienta muy bien; el viernes no estaba muy cómodo y las condiciones fueron muy difíciles todo el fin de semana, así que me siento muy bien».
El líder del campeonato, Thierry Neuville, disfrutó de una carrera relativamente tranquila hasta la cuarta posición, un resultado que le acerca aún más a su primer título de pilotos, ya que lidera la clasificación con 29 puntos de ventaja a falta de sólo dos pruebas. Neuville puede permitirse perder un puñado de puntos frente a Evans y Ogier en el Rallye de Europa Central del mes que viene y aun así alzarse con el título allí, siempre que supere a su compañero de equipo Tänak.
Aunque Ogier consiguió el máximo de puntos en el Súper Domingo, sus esperanzas de conseguir su noveno título del WRC parecen ahora escasas. El francés, que tenía velocidad para luchar por la victoria, retiró su Toyota el sábado con la suspensión dañada tras golpear una piedra.
Adrien Fourmaux fue el mejor clasificado de M-Sport Ford en quinta posición, por detrás de Neuville a 1 minuto 1.6 segundos. El resultado del francés podría haber sido aún mejor de no haber sido por la penalización de un minuto en la que incurrió por un registro de retraso el viernes.
La estrella emergente de Toyota, Sami Pajari, impresionó al terminar sexto en su segunda participación en el Rally1, mientras que el compañero de equipo de Fourmaux en Puma, Grégoire Munster, le siguió de cerca en séptima posición.
Esapekka Lappi iba camino de terminar octavo, pero se vio obligado a abandonar en el penúltimo tramo después de que un trompo dañara el radiador de su Hyundai. El abandono también marcó el final de la distinguida carrera en el WRC del copiloto Janne Ferm tras 90 pruebas, dos victorias y 15 podios.
Con Lappi fuera, los pilotos del Citroën C3 Rally2 Yohan Rossel y Nikolay Gryazin ascendieron a la octava y novena posición de la general, asegurándose los dos primeros puestos del WRC2. Sus resultados también aseguraron el título de Equipos WRC2 para DG Sport Competición. Gus Greensmith, otro de los líderes del WRC2, completó el top 10.
El campeonato volverá para Europa con el Rallye de Europa Central del 17 al 20 de octubre, la penúltima prueba de la temporada. Con base en la ciudad de Bad Grießbach, al sureste del país, la prueba recorrerá tramos de asfalto de Alemania, Austria y la República Checa.
