Kalle Rovanperä, pura magia sobre ruedas

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Todo el mundo espera grandes cosas de Kalle Rovanperä ahora que, con 19 años, ya es piloto oficial en el Campeonato Mundial de Rallyes. Pero eran pocos los que se esperaban que ya en su segundo rallye con el Toyota Yaris WRC fuera capaz de conseguir subirse al podio, nada menos que en el Rallye de Suecia donde 19 años atrás – cuando él era aún un retoño de cuatro meses – su padre Harri lograba la victoria.

Retrocedamos por un momento a finales de 2018, cuando Rovanperä hizo su primera temporada con Skoda en WRC2. Tras meses de progreso dentro del equipo checo, llegaba el RallyRACC, su último rallye del calendario ya que no iría a Australia. Verlo en vídeos ya resulta algo especial, pero cuando uno lo ve en persona, afrontar curva a curva cada tramo, el modo en el que es capaz de jugar con el coche, en muchos casos con una sonrisa de oreja a oreja… es como si las leyes de la física le permitieran hacer más ‘virguerías’ que al resto de los mortales. Como si entendiera la teoría de los rallyes a otro nivel y lo llevase a la práctica con la facilidad de un ‘dicho y hecho’. Y de paso, acabaría ganando en el RallyRACC dentro del WRC2, semanas después de hacerlo también en Gales.

Nada más conocerse su aterrizaje a la categoría máxima, proveniente de ser campeón de WRC2 Pro, Rovanperä rebajaba expectativas, hablando de un año de aprendizaje, sobre todo en la primera mitad. Que los tiempos competitivos y las luchas irían llegando en la segunda mitad, que se trataba de conducir sin presión, ya que para pelear por el título ya estaban Sébastien Ogier y Elfyn Evans. En Monte-Carlo ya estuvo cerca del ritmo de los de arriba, terminando quinto su primer rallye mundialista por delante de nada menos que Sébastien Loeb.

Llegados a una Suecia descongelada, pero con unas condiciones ‘árticas’ similares a aquellas en las que ha crecido, el genio del adolescente empezó a obrar. Desde el primer momento en los tramos noruegos del viernes estaba peleando contra nada menos que Ogier, con maquinaria de idénticas especificaciones y no muy lejos de los tiempos de Evans y Ott Tänak, el vigente campeón del mundo.

Ese ritmo se mantuvo durante todo el primer día, perdiendo la posición con Ogier debido a que caló el motor en una horquilla en el tramo de Torsby Sprint. No obstante, esto no le frenó y continuó al nivel de los tres de delante en toda la segunda etapa, volviendo a disputarle la posición al seis veces campeón mundial, llegando al Power Stage del domingo con opciones de subirse al podio por primera vez…eso sí, teniendo que batir al oriundo de Gap para ello.

Cuando llegó el momento de la verdad, habiendo pasado ya pilotos como Thierry Neuville o Esapekka Lappi por el tramo – pilotos que ya suman varias participaciones en este rallye y conocen bien el tramo de Likenäs – Rovanperä salió a por todas, pese a que solo ha competido en este tramo la pasada temporada con un Skoda Fabia R5 (cuando acabó segundo en WRC2 Pro). Los parciales indicaban que estaba superando a Neuville, ganador de este rallye en 2018, pero lo más espectacular estaba por venir. Ogier no era capaz de igualarle y, de hecho, no fue capaz de tomar tantos riesgos y perdió cuatro segundos en la parte final. Tänak y Evans tampoco lo hicieron. Con 19 años, Rovanperä tenía su primer scratch absoluto, su primer podio y su primera victoria en Power Stage, lo que le da cinco puntos extra.

Incluso los más allegados a él han quedado perplejos con lo que es capaz de hacer. Ni su padre, Harri, aún con lágrimas en los ojos minutos después de que Kalle se bajara del podio, imaginaba que su hijo fuera capaz de alcanzar el podio en su segundo rallye con Toyota Gazoo Racing, tras tan pocos meses desde que entró en el equipo. Quizás las palabras de Tommi Mäkinen eran un reflejo incluso mayor de la magia que se había visto en Likenäs: “Frente a pilotos que han hecho el tramo tantas y tantas veces, su primera vez (con un World RallyCar) y…y estaba volando. Ha sido increíble verlo”, declaraba emocionado el tetracampeón mundial.

Rovanperä es, con dos años y dos meses de diferencia, el más joven en la historia en lograr un podio absoluto en el WRC, batiendo el récord que ostentaba Evgeniy Novikov desde Portugal 2012. En esta lista de jóvenes alcanzando los puestos de honor por primera vez figuran también nombres del ayer y del hoy del WRC como François Duval, Markku Alén, Jari-Matti Latvala, Alessandro Fiorio, Dani Sordo, Mads Ostberg, Colin McRae y Pascal Gaban.

Toyota sale de Suecia con una victoria, un tercero (es decir, 40 puntos más para el campeonato de marcas) y un cuarto puesto, sus tres coches oficiales entre las cuatro primeras posiciones, además de un Takamoto Katsuta que sigue progresando y logró un octavo puesto, en el mismo escenario donde logró una gran victoria en 2018 dentro de WRC2, cuando con Pirelli batió al imperio de Michelin. En estos primeros compases de esta temporada 2020, parece que los hombres de Mäkinen son los candidatos para el título de marcas.

En lo que respecta a Rovanperä, este primer podio no solo sabe a gloria, sino que suena a un anticipo de lo que este pequeño finlandés puede llegar a obrar al volante de un World Rally Car. La magia seguirá en México y el resto del calendario, pero… ¿y la primera victoria? Nunca se debe vender la piel del oso antes de cazarla, pero si sigue aprendiendo y progresando de la manera en la que lo está haciendo, de la chistera de este chico puede salir cualquier cosa.