El nuevo Rally de Suecia salva su futuro en el Mundial de Rallyes. La nieve no ha faltado en ninguno de los kilómetros completados en la sección matinal de esta etapa de viernes. Las gélidas temperaturas que reinan en esta época del año en la región de Umea devuelven a la cita escandinava su esencia. Y en unas condiciones tan puras como estas, lo normal sería que los pilotos de la zona impongan sus normas. Y así lo han hecho.
Lo que sí sale de las leyes no escritas del campeonato es que quien abre pista en eventos de superficies sueltas retorne a las carpas de su equipo en la primera posición. Kalle Rovanperä lo ha conseguido. El grueso manto blanco que cubre las especiales nórdicas había que barrerlo. Pero además de la escoba que cargaba en sus neumáticos, portó otra en el paragolpes trasero de su Toyota. Te limpio por aquí, te ensucio por allí.
El líder virtual del certamen impartió un máster en consistencia. Sus rivales fueron capaces de establecer regsitros magníficos, aunque no de repetirlos. El estonio Ott Tänak, autor del scratch en la cronometrada de apertura, perdía el todo el apoyo aerodinámico del parachoques delantero de su Hyundai i20 N Rally1 y no encontraba el balance ideal para las zonas más lentas, descendiendo de un plumazo a P5.
Esapekka Lappi también pasó por la cima. En su retorno al Toyota Gazoo Racing WRT se mostró excelso... hasta que calaba el motor de su GR Yaris Rally1 en la salida del TC-3 y cedía unos valiosos segundos tratando de volver a arrancarlo. Si Tänak bajaba hasta el quinto lugar, él lo hacía hasta el sexto. Peor transcurrió la matinal para Craig Breen, que abandonaba al empanzar su Ford Puma Rally1 en un banco de nieve.
Sin cuajar unos cronos tan brillantes, pero limitando sus errores, Oliver Solberg, Elfyn Evans y Thierry Neuville marchan por delante de Tänak. El ídolo local, descontento con unas notas demasiado optimistas, ocupa el segundo puesto a 10.4" de Rovanperä. El británico de Toyota, tampoco satisfecho con su rendimiento ni con el frontal de su montura, se sitúa entremedias de unos Hyundai que, ahora sí, luchan contra el resto.
La diferencia que separa al primer del sexto clasificado no rebasa la frontera de los 15". Alejados de este grupo ruedan Takamoto Katsuta, Gus Greensmith y Adrien Fourmaux. Especialmente frustrado se siente el japonés, que arribaba a las rápidas pistas de la península escandinava confiado en luchar por grandes cosas. Mientras, los integrantes de M-Sport Ford pagan su inexperiencia en una superficie para especialistas.