Cuatro para uno, dos para otro. Pero respetando la distancia de seguridad en todo momento. La segunda etapa del 90º Rallye de Monte-Carlo se desarrolló sin mayores sobresaltos en WRC3, reservada a los vehículos Rally3 después de la última remodelación de las categorías soporte del Mundial de Rallyes. Las posiciones en la clasificación general no han sufrido variaciones, situación que agradece el líder, Jan Cerný.
El piloto checo gestiona su renta sobre el finlandés Sami Pajari, que progresa en su adaptación al sistema de tracción total de estos Ford Fiesta construidos por M-Sport Poland. Controlándose mutuamente, responden en cada especial a lo sucedido en la anterior. El planteamiento del vigente campeón de WRC Junior se centra en absorver los máximos conocimientos posibles de su nueva montura con vistas a las próximas citas.
Por la tercera plaza luchan Enrico Brazzoli y Zoltán László. Aunque el veterano piloto italiano no la ha perdido en la general, su rival se aproxima con peligro. La luz del sol ha sentado de fábula al húngaro, el más experimentado con el vehículo de la firma del óvalo. El déficit con el que partió esta mañana del Principado rumbo a los Alpes franceses se ha reducido de más de dos minutos a menos de 50".