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Hayden Paddon ha realizado unas declaraciones al medio Autosport en las que revela falta de agarre del Hyundai i20 WRC sobre tramos de gravilla. Según las palabras del piloto neozelandés, el problema reside en la configuración de la geometría de la suspensión, algo que no se puede cambiar hasta que llegue el modelo de 2017.
Aunque el nuevo modelo se ha mostrado desde el primer momento más competitivo que el i20 de 2015, Hyundai no ha terminado de recortar toda la distancia que le separaba de Volkswagen y sus Polo R WRC. Aún así, las dos victorias que ha conseguido el equipo de Michel Nandan han sido en dos pruebas de tierra – Argentina con Paddon y Cerdeña con Neuville.
“Miramos los datos en la prueba y cambiamos los muelles y trabajamos en los reglajes, pero era muy frustrante – no conseguíamos encontrar agarre. En sitios como Argentina o Polonia no era tan malo porque las carreteras eran más blandas y había un borde en la carretera que se podía utilizar para rebotar. En Finlandia no había mucho que hacer”, declaró Paddon.
“Parece que es una cosa de la geometría de la suspensión, algo que no podemos arreglar en el coche que tenemos ahora. Probablemente tengamos que esperar hasta el coche de 2017 para llegar al fondo de este asunto”, comentó el piloto neozelandés de Hyundai.
