Twitter (@RubenOteroDo)
Sin un asiento oficial para competir internacionalmente en 2019, Hayden Paddon llegará a Australia con el objetivo de completar un buen rallye e intentar disfrutar de la oportunidad. Es consciente de que esta podría ser su última vez en un coche de estas características y por ello, pretende disfrutar al máximo del rallye, buscando además un interesante resultado para el equipo M-Sport.
"Una victoria sería bastante especial y esa es la progresión desde el quinto, cuarto, tercero y segundo lugar, pero he estado fuera del coche durante un año. Sabes que cada vez que me subo a un coche de rallyes doy lo mejor de mí mismo y eso es lo que haré la semana que viene", aseguraba el propio piloto en una entrevista mantenida con el portal oficial del WRC.
El ex-piloto de Hyundai se ha mostrado muy agradecido con la oportunidad que desde el conjunto de Malcolm Wilson le han brindado, pudiendo catar además hace unas semanas el nuevo Ford Fiesta MKII R5. Con esta montura consiguió unas buenas sensaciones que pronto le permitieron ir rápido, algo similar a lo que le ha ocurrido con el homólogo en la categoría reina, al que se subió el pasado mes en España.
"Hice un día en España en octubre y piloté 180 km. Inmediatamente, me sentí como si me pasara un guante por encima de la mano, me sentí muy cómodo de inmediato. Me encantó el coche, era tan predecible y tan bueno. Piloté el R5 en GB y era bueno, pero eso requirió un poco de adaptación para conseguir el estilo, mientras que esto era exactamente lo que yo quería hacer y la forma en que yo quería pilotar", asegura.
"Todos en M-Sport han sido muy buenos y han hecho todo lo posible para ponerme en la mejor posición posible para Australia. Es un gran equipo con el que trabajar", añadía. Su retorno en Australia ha levando cierto revuelo mediático, más si cabe después de que su intento de regreso en Finlandia se viese frustrado en la sesión de test previa, cuando una salida de pista tiró por la borda cualquier opción.