Si en el tramo anterior Ott Tänak se hacía con el scratch -el 250 de su carrera deportiva en el WRC- y ponía más tierra de por medio al frente de la general, en la siguiente especial todo el panorama ha cambiado en un abrir y cerrar de ojos cuando el campeón del mundo de 2019 ha arrancado la rueda trasera derecha de su i20 Coupé WRC.
El piloto estonio ha cometido un error poco habitual en él y ha tirado por la borda un más que posible triunfo en el Rallye de Portugal. Desesperado por el fallo, Tänak y su copiloto se han bajado del coche para intentar reparar la avería, pero los daños son demasiado grandes como para poder continuar en carrera.
Golpe de teatro de los buenos, que deja a Elfyn Evans al frente de la clasificación general con sólo la súper especial de Oporto para terminar la segunda etapa de la cita lusa. El galés de Toyota tiene a Dani Sordo, que se ha quedado como único Toyota en liza, a 16.4 segundos.
El abandono de Tänak también repercute considerablemente en la pelea por el título mundial, sin ir más lejos el actual líder del campeonato, Sébastien Ogier, ya es tercero en Portugal a poco más de un minuto de su compañero de equipo y 2.5 segundos por delante del japonés Takamoto Katsuta.
Los Ford Fiesta WRC de Gus Greensmith y Adrien Fourmaux completan el Top 6. El británico y el francés están seaprados por 7.7 segundos después de que el primero venga sufriendo problemas con el acelerador de su coche en los dos últimos tramos.
La segunda pasada por Amarante y sus 37 kilómetros se previa clave en el devenir del rallye, como así ha sido con la salida de Tänak, pero antes del inicio de esta especial también hemos tenido movida, ya que Kalle Rovanperä ha sufrido problemas mecánicos en su Yaris WRC que le han obligado a abandonar.
Ahora los equipos se dirigen de vuelta a Oporto donde a partir de las 20 horas se disputará la súper especial con la que se pondrá punto y final a esta dura e intensa joranda en los tramos de tierra lusos.