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El Campeonato Mundial de Rallyes ha perdido otra ronda más al cancelarse el Rallye Ypres de Bélgica, que iba a ser la séptima prueba puntuable del calendario. Tras meses de trabajo sin fin por parte de los organizadores y un evento revisado para acoger a la caravana mundialista, la prueba ha sido víctima de los efectos colaterales de la pandemia del coronavirus en una segunda ola especialmente virulenta en Bélgica, como han adelantado medios como Radio 2 West Vlaanderen, principal radio de la zona en la que se celebra el rallye.
La entrada de Ypres empezó a gestarse en el calendario en los meses de verano, aprovechando su fecha pospuesta al mes de octubre (su fecha tradicional es al principio del verano, en la segunda quincena de junio). No obstante, cuando se formalizó su entrada, se pospuso una vez más a los días 20-22 de noviembre, la fecha que dejaba vacante el también cancelado Rallye de Japón.
En principio la ronda final del WRC (antes de que se admitiera el Monza Rally Show, prueba también en duda en estos momentos aunque por cuestiones financieras), iba a ser un auténtico colofón a una extraña temporada. Dos etapas recorriendo los tramos técnicos y traicioneros de asfalto al oeste del país, más impredecibles que nunca por el paso de junio a noviembre. La tercera y última etapa llevaba a la caravana mundialista recorrer todo el país hasta llegar al circuito de Spa-Francorchamps, situado al este. Allí no solo terminaría recorriendo una variante del mítico trazado de Fórmula 1 sino que iba a coincidir también con las estrellas del Mundial de Rallycross, celebrándose ese fin de semana el RX de Bélgica.
De cara al rallye, WRC Promoter había llegado a un acuerdo con el hospital Jan Yperman de modo que hiciera unos 2.500 test PCR para asegurar que no llegase ningún positivo al parque de asistencias del rallye. Aunque en principio se esperaba la asistencia de público, desde hace días estaba claro que el rallye, de disputarse, se haría sin zonas de espectadores habilitadas como ya adelantó Revista Scratch.
Ahora bien, lejos de frenarse, Bélgica sigue siendo un país muy afectado por la pandemia. En la última semana se han registrado 90.817 nuevos casos y 390 fallecimientos, elevando la cuota total a 333.624 casos y 10.899 fallecidos desde que empezó la pandemia. Con 28.786 casos por millón de habitantes está a la cima del continente en estos momentos, superando a la República Checa, Armenia, España o Rusia. Ante esta situación, no ha quedado más remedio que cancelar la prueba, truncando los sueños de la afición belga (y de Thierry Neuville) de ver el WRC en casa, quedándose con la miel en los labios tras los test previos celebrados en días recientes.
A falta de anuncio oficial, el cual se espera en las próximas horas, el final de temporada se realizaría en el Monza Rally Show – ahora bien, las cuestiones económicas hacen peligrar la prueba, siendo en sí mismas efectos colaterales del covid-19. El Automobile Club d’Italia precisa de un desembolso económico por parte de los municipios por los que pasaría la prueba lombarda, un dinero con el que los municipios no cuentan al haber destinado fondos a combatir la crisis sanitaria, según pudo averiguar este medio.
