Los pilotos han dicho basta...o, más bien, han decidido no decir nada. Durante el shakedown del Rally Safari, en las declaraciones al final de la pasada televisada, todos ellos (tal como ya avisaron al establecer la WoRDA semanas atrás) han seguido un voto de silencio. Una protesta en contra de la sanción de 10.000 € impuesta a Adrien Fourmaux al final del Rally de Suecia.
El problema era evidente ya desde la llegada de Elfyn Evans, así como con Thierry Neuville, Kalle Rovanperä, Ott Tänak o Takamoto Katsuta - quien, directamente, no dijo ni una sola palabra, al igual que el propio Fourmaux. Todos explicaron que van a seguir a rajatabla el voto de silencio. Quien más habló fue Neuville, vigente campeón mundial. Eso sí, lo dijo en francés - esto puede entenderse tanto como un mensaje directo a la FIA, organización eminentente francesa asentada en París, como por la obviedad de que es su lengua materna.
"Como ya entenderéis, habrá muy poca comunicación de nuestra parte este fin de semana. Estamos decepcionados de no haber tenido más comunicación con la FIA desde el Rally de Suecia y la multa a Adrien. Por unanimidad, hemos decidido no hablar al final de cada tramo", declaró Neuville.
Y es que el problema está más que claro, tal como decía Tänak: mantendrán el voto de silencio hasta que sea cómodo para los pilotos. Su confianza con la FIA se ha roto hasta este punto, más allá de querer evitar sanciones de una u otra índole. Tan solo recibieron un correo de Mohammed Ben Sulayem 10 minutos antes de que comenzara el shakedown.
Eso sí, Neuville ha asegurado que sí hablarán al final del tramo más largo de todo el rally - eso es tramo de Camp Moran de 31,4 kilómetros de longitud que harán a doble pasada, una a primera hora del viernes y otra al empezar el bucle vespertino. Quien quiera seguir en vivo esta historia, una de las varias que reflejan el descontento de pilotos y equipos con respecto al máximo ente organizador, tendrá que madrugar...