El Mini vuelve al WRX

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El Mini Cooper estará de vuelta en el Campeonato Mundial de Rallycross esta temporada con una unidad del Cooper S X1, pilotada por el ex piloto de motocross Oliver Bennett. El británico estará acompañado por el equipo Xite Racing Team, empezando su temporada los próximos días 13 y 14 de abril en el circuito de Barcelona.

Bennett logró acabar en tercera posición dentro del Campeonato Británico de Rallycross a los mandos de un Ford Fiesta Supercar ex Olsbergs MSE – también estuvo presente en el RX de Lydden Hill en 2017 tal como indica la web oficial del WRX. Su programa para este año incluye ocho pruebas del WRX, estando asegurada su presencia en su carrera de casa en el circuito de Silverstone.

“El coche salió rápido desde el principio así que ahora priorizamos los reglajes. La idea es disfrutar del fin de semana ya que es un logro masivo para nosotros haber llegado a la primera prueba y queremos que la gente vea el coche. Esperamos acabar todas las clasificaciones y mejorar los reglajes a lo largo del fin de semana”, declaró Bennett.

“Tengo ganas de llegar a Silverstone, ser el único británico habitual en el WRX con un coche y un equipo cien por cien británicos, va a ser un evento muy icónico. Esperamos hacerlo bien con el apoyo del público. Creo que el coche es más que capaz de llegar a las semifinales, no estoy seguro de cuando o dónde pero ya sorprendimos en nuestro primer año en el rallycross británico, así que esperamos poder hacer lo mismo en esta segunda temporada”, añadió.

Los primeros Mini que se vieron en el Mundial de Rallycross eran derivados de los Mini WRC que construyó Prodrive de manera original para el Mundial de Rallyes en 2011 y 2012, llevándolo equipos como JRM y pilotos como Liam Doran o Guy Wilks. No obstante, no solo se vieron superados por los equipos oficiales y semioficiales, sino también por otras estructuras privadas que optaron por coches como el Ford Fiesta (basado en el Fiesta R5 de M-Sport, también coche de rallyes).